EL PROYECTO DEL REINO DE DIOS
Se han escrito obras muy importantes para definir dónde está la «esencia del cristianismo». Sin embargo, para conocer el centro de la fe cristiana no hay que acudir a ninguna teoría teológica. Lo primero es captar qué fue para Jesús su objetivo, el centro de su vida, la causa a la que se dedicó en cuerpo y alma.
Nadie duda hoy de que el evangelio de Marcos lo ha resumido acertadamente con estas palabras: «El reino de Dios está cerca. Convertíos y creed esta Buena Noticia». El objetivo de Jesús fue introducir en el mundo lo que él llamaba «el reino de Dios»: una sociedad estructurada de manera justa y digna para todos, tal como la quiere Dios.
Cuando Dios reina en el mundo, la humanidad progresa en justicia, solidaridad, compasión, fraternidad y paz. A esto se dedicó Jesús con verdadera pasión. Por ello fue perseguido, torturado y ejecutado. «El reino de Dios» fue lo absoluto para él.
La conclusión es evidente: la fuerza, el motor, el objetivo, la razón y el sentido último del cristianismo es «el reino de Dios», no otra cosa. El criterio para medir la identidad de los cristianos, la verdad de una espiritualidad o la autenticidad de lo que hace la Iglesia es siempre «el reino de Dios». Un reino que comienza aquí y alcanza su plenitud en la vida eterna.
La única manera de mirar la vida como la miraba Jesús, la única forma de sentir las cosas como las sentía él, el único modo de actuar como él actuaba, es orientar la vida a construir un mundo más humano. Sin embargo, muchos cristianos no han oído hablar así del «reino de Dios». Y no pocos teólogos lo hemos tenido que ir descubriendo poco a poco a lo largo de nuestra vida.
Una de las «herejías» más graves que se ha ido introduciendo en el cristianismo es hacer de la Iglesia lo absoluto. Pensar que la Iglesia es lo central, la realidad ante la cual todo lo demás ha de quedar subordinado; hacer de la Iglesia el «sustitutivo» del reino de Dios; trabajar por la Iglesia y preocuparnos de sus problemas, olvidando el sufrimiento que hay en el mundo y la lucha por una organización más justa de la vida.
No es fácil mantener un cristianismo orientado según el reino de Dios, pero, cuando se trabaja en esa dirección, la fe se transforma, se hace más creativa y, sobre todo, más evangélica y humana.
José Antonio Pagola
Efectivamente, eso es lo que se identifica en el quehacer de la iglesia, hay una preocupación por el ser de la iglesia y se deja de lado el trabajo para contribuir a la transformación de este mundo injusto. Ojalá todos los que nos consideramos iglesia tomemos conciencia y demos el giro que se requiere, siguiendo las huellas del Maestro,
Gracias por esa reflexión!!!
ORAR CON EL EVANGELIO DEL DOMINGO
Convertíos y creed en el Evangelio
3 TIEMPO ORDINARIO-B. (MARCOS 1, 14-20)
Evangelio del 24/enero/2021
Enlace del encuentro
Discípulos Misioneros le está invitando a una reunión de Zoom programada.
Tema: Orar con el evangelio del 24/Enero/2021
Hora: 18 ene. 2021 20:45 h Madrid
Unirse a la reunión Zoom
https://us02web.zoom.us/j/87389088269?pwd=Qm8xWUdUcWNWUVhZYU8yalFDL01Mdz09
ID de reunión: 873 8908 8269
Código de acceso: 500639
Preparación para la escucha de la Palabra de Dios
(En casa: busca un lugar tranquilo donde puedas leer en paz la Palabra de Dios. Serena tu espíritu y toma aire varias veces profundamente.)
1 ORACIÓN INICIAL
Oración para pedir el don de comprender el Evangelio y poder conocer y amar a Jesucristo y, de este modo, poder seguirle mejor y darlo a conocer.
¡Oh Verbo! ¡Oh Cristo!
¡Qué bello eres! ¡Qué grande eres!
¿Quién sabrá conocerte? ¿Quién podrá comprenderte?
Haz, oh Cristo, que yo te conozca y que te ame.
Ya que tú eres la luz,
deja llegar un rayo de esta divina luz
sobre mi pobre alma,
a fin de que pueda verte y comprenderte.
Pon en mí una gran fe en ti,
a fin de que todas tus palabras
sean para mí otras tantas luces
que me iluminen y me hagan ir a ti, y seguirte,
en todos los caminos de la justicia y de la verdad.
¡Oh Cristo! ¡Oh Verbo!
Tú eres mi Señor y mi solo y único Maestro.
Habla, yo quiero escucharte
y poner tu palabra en práctica.
Quiero escuchar tu divina palabra,
porque viene del cielo.
Quiero escucharla, meditarla,
ponerla en práctica,
porque en tu palabra está la vida,
la alegría, la paz y la felicidad.
Habla, Señor, tú eres mi Señor y mi Maestro
y no quiero escucharte sino a ti.
Antoine Chevrier,1826-1879
2 SALUDO y PRESENTACIÓN
¿Cómo y en qué estamos? (semana pasada)
3 ACERCAMIENTO AL EVANGELIO DEL DOMINGO
(En casa)
3.1 Santo evangelio según San Marcos (1, 14-20)
https://conferenciaepiscopal.es/biblia/marcos/#cap1
Leer y releer la Palabra, ¿qué dice o/y cuenta el evangelio?
14Después de que Juan fue entregado, Jesús se marchó a Galilea a proclamar el Evangelio de Dios; 15decía: «Se ha cumplido el tiempo y está cerca el reino de Dios. Convertíos y creed en el Evangelio».
16Pasando junto al mar de Galilea, vio a Simón y a Andrés, el hermano de Simón, echando las redes en el mar, pues eran pescadores. 17Jesús les dijo: «Venid en pos de mí y os haré pescadores de hombres». 18Inmediatamente dejaron las redes y lo siguieron.
19Un poco más adelante vio a Santiago, el de Zebedeo, y a su hermano Juan, que estaban en la barca repasando las redes. 20A continuación los llamó, dejaron a su padre Zebedeo en la barca con los jornaleros y se marcharon en pos de él.
(SILENCIO)
3.2 Comentarios de referencia
Antonio Pagola
https://www.gruposdejesus.com/3-tiempo-ordinario-b-marcos-114-20-2/
ASOCIACIÓN DE SACERDOTES DEL PRADO
http://sacerdotesdelprado.org/propuesta-estudio-evangelio-domingo/1242-domingo-3-t-o-b
4 LLAMADAS A LA ACCIÓN DE GRACIAS, PETICIONES Y COMPROMISOS, …
(trabajar en casa y poner en común en el encuentro)
¿Qué me dice a mí el evangelio? ¿Qué buena noticia me anuncia o revela hoy el evangelio?
(SILENCIO)
¿Qué respuesta me pide a mí el Señor? llamadas a la conversión, acción de gracias, peticiones, … para poner en marcha el proyecto de «Discípulos Misioneros».
(SILENCIO)
Oración de los Fieles
Encomendemos a Dios nuestro Padre las necesidades y sufrimientos de este mundo, y digámosle:
R/. Renueva nuestros corazones, Señor.
Por nuestra querida Iglesia, para que el Señor la ayude a seguir renovándose, para que permanezca en el camino del evangelio y ayude a los hombres a vivirlo como Buena Nueva de salvación, roguemos al Señor.
Por los que abandonan sus redes para seguir a Jesús, el Señor, para que vivan de tal manera el evangelio que lo hagan visible y tangible, roguemos al Señor.
Por los que viven alegres y con gozo, para que encuentren tiempo para llevar alegría a otros, roguemos al Señor.
Por los que lloran, para que sigan esperando el día en que se sequen sus lágrimas, roguemos al Señor.
Y por todos nosotros, para que el Señor nos dé valor para tomar en serio el evangelio y para vivir en unión más íntima con Jesús, roguemos al Señor.
Sigue llamándonos, Señor, pero danos la fuerza para responder generosamente a tu llamado, por el poder de Jesucristo, nuestro Señor.
5 PADRENUESTRO
Orar en silencio, al final quién quiera puede resaltar alguna de las frases que más le haya tocado su corazón
6 ORACIÓN FINAL CON MARÍA
¡Madre, ayuda nuestra fe!
Abre nuestro oído a la palabra, para que reconozcamos la voz de Dios y su llamada.
Aviva en nosotros el deseo de seguir sus pasos, saliendo de nuestra tierra y confiando en su promesa.
Ayúdanos a dejarnos tocar por su amor, para que podamos tocarlo en la fe.
Ayúdanos a fiarnos plenamente de él, a creer en su amor, sobre todo en los momentos de tribulación y de cruz, cuando nuestra fe es llamada a crecer y a madurar.
Siembra en nuestra fe la alegría del resucitado.
Recuérdanos que quien cree no está nunca solo.
Enséñanos a mirar con los ojos de Jesús, para que Él sea luz en nuestro camino.
Y que esta luz de la fe crezca continuamente en nosotros, hasta que llegue el día sin ocaso, que es el mismo Cristo, TU Hijo, nuestro Señor.
7 LITURGIA DE LA PALABRA DEL DOMINGO
https://www.ciudadredonda.org/calendario-lecturas/liturgia-del-domingo
8 INFORMACIÓN, RUEGOS Y PREGUNTAS
000discipulosmisioneros@gmail.com
PAZ Y SALUD