Lucas 9,57-62
Mientras iban de camino, uno le dijo [a Jesús]:
—Te seguiré a donde vayas.
Jesús le respondió:
—Las zorras tienen madrigueras y los pájaros nidos, pero el Hijo del hombre no tiene donde reclinar su cabeza.
A otro le dijo:
—Sígueme.
Él respondió:
—Déjame primero ir a enterrar a mi padre.
Le contestó:
—Deja que los muertos entierren a sus muertos; tú vente a anunciar el reino de Dios.
Otro le dijo:
—Te seguiré, Señor; pero déjame primero despedirme de mi familia.
Jesús le contestó:
—El que echa mano al arado y sigue mirando atrás, no vale para el reino de Dios.
- Ver el contenido de las dos reuniones de este tema en el libro Grupos de Jesús, de José Antonio Pagola
Primera reunión: Acercamiento al Evangelio
– Guía de lectura
– Acercamiento al texto evangélico
– Comentario
Segunda reunión: Acercamiento a la vida
– Conversión personal
– Compromiso en el proyecto de Jesús
– Sugerencias para la oración
Queridos amigos y amigas de Grupos de Jesús:
Somos el GVJ 23, un grupo virtual que ha comenzado tras la convocatoria del mes
de mayo de 2020 realizada desde la web Grupos de Jesús y queremos compartir
algo de lo que hemos reflexionado sobre el tema 32: Sígueme, el primero de la
etapa 6.
Seguimiento ofrecido con certeza
La luz y esperanza que buscamos desde que tenemos conciencia, y que se ven
reflejadas en la persona de Jesús, hacen de él una figura atractiva y esto genera el
primer impulso del primer personaje para ofrecer su seguimiento. Al mencionar "a
donde vayas", este personaje deja ver su actitud dispuesta y la certeza del
seguimiento que ofrece. El Señor luego le da una respuesta poco convencional para
que esa persona sepa qué esperar del seguimiento hacia su persona. Jesús no
promete seguridad, ni dinero, ni poder.
Seguimiento solicitado
Jesús mismo pide a alguien seguirle, pero no obtiene inmediatez en la respuesta.
En esta escena se esclarece la condición de dejar morir al hombre viejo y dejar
nacer al nuevo para anunciar la presencia del Reino, donde el proyecto
humanizador del Padre tenga lugar. Parece que ese gesto de despedirse de los
muertos es una falta de priorizar el seguir a Jesús y anunciar el reino. Abrir caminos
al reino de Dios es siempre la tarea más urgente.
Seguimiento ofrecido con dudas
La tercera persona habla de despedirse y es posible que en la respuesta de Jesús
se encuentra la idea de olvidar el pasado, olvidar lo que fuiste, ya que al seguirlo es
una manera de nacer de nuevo, ser hombre nuevo, no podemos estar volteando
atrás. En esta tercera escena, nos pide no retornar a nuestra vida y lazos que de
seguro nos apartarán de su mano, nos pide “determinada determinación”.
Oramos juntos
Compartimos con ustedes esta canción:
Te seguiré llamando, te seguiré llamando
aunque apiles piedras para detener el cauce
del torrente de agua viva que Yo soy.
Te seguiré llamando, te seguiré llamando
desde lo más profundo, desde donde la verdad resuena por cada rincón que hay en
tu cuerpo.
Te seguiré llamando, te seguiré llamando
aunque agarres la puerta y te marches con pie firme,
aunque pongas toda tierra de por medio.
Te seguiré llamando, te seguiré llamando
tengo una vida entera para dártela si quieres, créeme.
Te seguiré llamando.
https://www.youtube.com/watch?v=KCz52R_caK4
Javier, Mayertzy y Wilson
Grupo Virtual de Jesús 23
Grupo Virtual de Jesús 22 Monseñor Romero
Sígueme es una invitación clara, precisa y directa que hace nuestro Señor, pero qué difícil para el ser humano poder comprender este llamado, porque siempre en la mente del hombre están presentes las excusas y el deseo anticipado de realización personal.
Este evangelio nos resultó desconcertante, nos hizo pensar en la diferencia entre renunciar y elegir.
Jesús eligió a sus discípulos más allá de sus debilidades como nos elige a nosotros. ¿Escuchamos esa llamada? ¿Hay verdadero amor y vocación en nuestro seguimiento? ¿Lo elijo realmente? ¿Entiendo lo que Jesús me quiere decir? Muy pocos lo entienden y lo siguen. La clave para seguirlo sin reparos es el amor.
El reino de Dios es presente, es el camino al encuentro con el otro, no cabe el tener situaciones aseguradas. Vivir cada momento como lo verdadero y real. La entrega al Reino obliga a renunciar a toda seguridad para ponernos solo – y todo – en manos de Dios; Jesús anuncia que ni siquiera está asegurado un lugar para reclinar la cabeza.
Sin embargo ¿qué tiene Jesús para atraer tanto a las multitudes?
En este evangelio se nos presenta un Cristo exigente: » quien pone la mano en el arado y mira hacia atrás no es digno de mí». Jesús muestra de una manera clara y contundente que optar por el Reino significa una disposición total. Sólo Dios debe ser el primero y lo primero.
Son duras las palabras de la elección de Dios, pero al mismo tiempo donan una paz y una felicidad inmensa dentro del alma.
Te seguiré a donde vayas decimos, al principio estamos entusiasmados, nos ofrecemos, todo nos parece bien. Luego cuando empiezan las dificultades, las rencillas en la comunidad, las pruebas, las dificultades muchas veces dejamos todo nos olvidamos que amar a Jesús es seguirlo a ÉL hasta las últimas consecuencias. El Papa Francisco nos dice “Jesús no impone nunca, Jesús es humilde, Jesús invita. Si quieres, ven. La humildad de Jesús es así. Él invita siempre, no impone (30 de junio de 2013)
Jesús advierte, que su seguimiento no puede sustentarse en puro encantamiento que quedará encerrada en una comunidad, sino por una toma de conciencia de búsqueda de una fraternidad universal, de servicio a los necesitados, que involucra quedarse sin nido, sin madriguera, hasta sin un lugar donde reclinar la cabeza. Jesús nos llama a seguirle cuando despierta en el corazón esa compasión amorosa hacia los necesitados.
El Señor nos llama, nos invita a comprometernos con la construcción del reino y con la lucha por la justicia social.
Tal vez lo que Jesús nos pide es que ante las diferentes situaciones nos arrodillemos con humildad y pongamos toda nuestra confianza en El.
Y para eso necesitamos más momentos de oración, meditación, reflexión personal pues todo discernimiento conlleva priorizaciones y gradualidades, que solo se puede encauzar con los ojos del espíritu, que nos alumbra hacia la plenitud. No es un camino fácil, requiere voluntad, disponibilidad… Nos llama, en definitiva, a más amor, atención, silencio, escucha. El Amor – que es Dios – es la fuerza transformadora para llevar una vida plena. El proyecto humanizador del Reino de Dios lo podemos transmitir a toda persona siempre que nuestra vida sea coherente con una actitud cristiana. “Enséñanos a ver lo que es la vida y seremos sensatos. La máxima sabiduría está en conocer la fugacidad de nuestra vida presente y poner la mirada en el Dios que nos sostiene.”
Conversación con Jesús
Señor, me has mirado a los ojos
Sonriendo, has dicho mi nombre…
Me animas a seguir tus caminos de compartir en comunidad
el compromiso de llevar tu amor y compasión por los más necesitados,
buscando encontrar en el camino la luz alumbre a mi espíritu hacia su plenitud.
Quiero Padre sentir los latidos de tu corazón al caminar.
Muéstrate a mí y hazme conocer la posada en el camino: Tu viña, donde descansar.
Gracias por dar tu vida para mostrarnos el camino hacia el amor verdadero.
Estamos dispuestos seguirte.
Danos fuerza y valor para cumplir tu voluntad. Amén.
Aporte a la web: TEMA 32. SÍGUEME (Lucas 9, 57-62)
¿Qué nos interpela esta lectura? Todos los pedidos parecen totalmente normales, hasta nos imaginamos en esa situación. Jesús es exigente, pide que dejemos todo para seguirlo nos resalta que el hijo del hombre no tiene donde reclinar la cabeza, pues es como decir que aquí no es nuestra vida? ¿Estamos dispuestas realmente a dejar todo? ¿realmente confiamos en el Señor?… ¿Seremos capaces de aventurarnos al vacío?… ¿Seremos capaz de beber su cáliz?…
Estamos atados a muchas cosas y situaciones, queremos comprometernos, construir el Reino y avanzar con Jesús, pero supongo que nos es más fácil seguir una senda conocida y que nos da cierta sensación de seguridad, que ir abriendo caminos.
A través de los diálogos que fuimos teniendo se fueron iluminando ciertas verdades, su Reino se construye aquí y ahora. Es un caminar diario sin pretensiones, y con mucha esperanza vamos dando pequeños pasos, como nenes y nenas que están aprendiendo a caminar, y nos vamos liberando, a veces muy lentamente y otras con más decisión. Quizás porque nos planteamos la vida como una opción entre dos caminos es que nos cuesta tanto abandonar el conocido. Aun así, vamos dando pequeños pasos, lo que nos hace reflexionar en lo que dice San Ignacio de Loyola, cuando habla del “desapego” tanto a las personas, como a las cosas, habla de una “indiferencia amorosa”. Después de todo, no nos vamos a llevar NADA, cuando Él nos llame. Y como dice Anthony de Mello, “ir ligeros de equipaje” …
Entonces insistimos en la urgencia de anunciar el reino de Dios, antes que cualquier otra cosa. Sin que nadie nos retenga, frene o retrase nuestra decisión. Trabajar por una familia nueva, no necesariamente unidos por lazos de sangre, pero unidos por el deseo de cumplir la voluntad del Padre, en donde todos se acojan como hermanos y hermanas por ser hijos e hijas del único Dios, En la medida de nuestras posibilidades lo intentamos y nos gustaría poder trabajar con un mayor compromiso. Creemos que Dios no nos ha abandonado y que está junto a nosotros, aunque no podamos seguirlo en este momento, como desearíamos acogiendo especialmente a los más necesitados y huérfanos de ayuda.
Le pedimos al Espíritu Santo, lo necesario para seguirlo, y a nuestra Madre Santísima su intercesión, confiando y agradeciendo su respuesta, para la mayor gloria de Dios.
Roser, Carmen, Mariana, Shirley, Griselda y Natalia
Grupo Virtual de Jesús 20
Estas son las reflexiones y comentarios que nos ha suscitado el tema 32 “Sígueme” en el GVJ Camino de Emaús.
Pienso que todxs tenemos miradas para atrás, para los costados y para todos lados, porque estamos en una realidad hiper compleja y poliédrica y el discernimiento de ese seguimiento no es una vez y para siempre, es cada día, todo el tiempo y a veces cuesta mucho, no es claro el panorama, más bien hay confusión y angustia. Solo nos sostiene la CONFIANZA en su persona. La fe en que la utopía de Jesús, vale la pena. La sola esperanza en que permanecer en Dios volverá fecundos tantos esfuerzos.
El trabajar por el reino no siempre significa salir de nuestro entorno, sino quizás prestarle mayor atención y aportar lo que esté a nuestro alcance para hacerlo más justo, más armónico, más digno y más equitativo para todos/as.
“Te seguiré adonde vayas” quizás pueda ser equivalente a “te llevaré a donde vaya”, “te haré presente en cada acto de mi vida”, “contribuiré a la construcción de tu reino desde el lugar que me toque estar”… Es decir, que se necesita compromiso, coherencia y fortaleza para enfrentar los obstáculos, que pueden ser muchos si nos decidimos en serio a seguirlo y proclamarlo.
Pues si, después de la experiencia de mi vida, si es una aventura arriesgada pues muchas veces siguiendo lo que Jesús dice te ocasiona problemas y otras veces no has entendido bien el mensaje y metes la pata. A pesar de todo los errores y problemas que he tenido en mi vida, me alegro de seguirle en la medida en que he podido, creo que otra vida no tendría sentido para mí.
Jesús tiene claro que es prioritario el proyecto del Padre porque los últimos, los pecadores, los sin nada, están en peligro de ser infelices. Y el Padre quiere la felicidad para todos y todas.
Pero Jesús separa claramente lo que serían el honor y el poder que se podía entender que lograrían sus seguidores en el reino de Dios que él proclamaba, porque se ha solidarizado con los pobres y excluidos de la sociedad y porque ha querido trazar su movimiento de Reino desde y con esos excluidos, sin tomar el poder, sin apoyarse en una sociedad patriarcal de ricos y poderosos que tienen dónde apoyar bien su cabeza y descansar, sobre la pobreza y sufrimiento de otros.
Ahora trato de dilucidar qué esperas de mí como seguidor tuyo. Sé que tú no necesitas héroes para propagar tu buena noticia, que te apañas muy bien con personas corrientes que, con todas sus debilidades y limitaciones, confían en ti, y a los que tu Espíritu, que vive oculto en ellos, les inspira la forma en que sus vidas corrientes pueden revelar tu misericordia y pueden transmitir paz y alegría a los que les rodean
Conversión es crecer, aprender, acercarnos a la mejor versión de lo que podemos ser, hacer vida el sueño de Dios para con cada quien. Por eso el llamado es una invitación, que podemos asumir con total deseo y libertad. O no, y titubear, o quedarnos a mitad de camino. También es gratuidad pura, un regalo, un don. El espíritu sopla donde quiere, damos nuestros 5 panes y 2 pescados, Jesús hace el resto. Siempre hay un paso más en que se puedan profundizar esas opciones, purificarlas, hacerlas más ciertas y profundas.
Si esto lo miro desde la fe, no es ni mi esfuerzo ni la suerte, sino que todo lo que Dios me da para tener una vida más plena y humana, esto lo tengo que hacer circular, compartir. Es como que Jesús me dijera: Si querés amar como yo te amo, vení y seguime.
Veo todos los días a muchas personas colaborando con el Reino de Dios sin sentirse ni llamarse cristianos. Más que decir, es hacer. E irradiar la luz, el amor y la serenidad de estar en ese camino.
La escuela es un lugar donde podemos sembrar la Palabra, sin siquiera pronunciar el nombre de Dios. Podemos abrir las mentes y los corazones a la ciencia y a las ansias de justicia, podemos compartir el pan del saber y el pan de la compañía.
Para que el reino de Dios crezca cómodamente, los que tenemos que andar incómodos somos nosotros y nosotras. No se trata de inconformismo ni de masoquismo, es la complejidad de la realidad tejida con ese amor inmenso que nos inspira el Señor y que nos desborda, pero que nos lanza de lleno, sin mirar para atrás. Siempre se puede algo más, pero no como una competencia deportiva. Andar por puro amor el camino personal de humanización para compartir belleza, verdad, bondad. Quizás asumir eso con sencillez sea la sabiduría que hoy no tengo, pero pero a la que quiero ir al encuentro.
Si tuviera que decir en pocas palabras, hoy el llamado es a SOSTENER, SOSTENER, SOSTENER… A quienes se caen, están deprimidos, enfermos, asqueados, solos, superados por el dolor, tristes, necesitados, pobres, sin encontrarle sentido a la vida…etc. A ayudar en lo que se necesita. A hacerme prójima.
Necesito abandonarme a Él y confiar. Necesito hacer pausas y conversar más con el Padre, como lo hacía Jesús. Necesito también apoyo del grupo. Hay fuego, hay luz, hay amor fraterno, hay la mano amiga, hay ejemplo, hay potencia motorizante, hay energía.
GVJ Shemá-Effetá
1. El seguimiento de Jesús debe ser una decisión que no se tome a la ligera, no debe ser algo impulsivo. Sin embargo, el Maestro nos pide un seguimiento radical, dejando atrás todo lo demás. Es arriesgado, ¡claro!… Pero, ¿dónde no hay riesgo?
2. Con Jesús, lo único “seguro” es hacer camino al andar, aprender a amar y a dejar “huellas” mientras se va… Este camino no es para “comodones” ni para quienes deseen “acomodarse” en todo este proceso vital. Seguirlo es un “riesgo” que puede, incluso, “costarme” la propia vida que creo “poseer”.
3. Se trata de abandonar la comodidad y entrar en un peregrinar, se trata hasta de arriesgar la vida misma, pero sabiendo que estamos apostando a algo mejor: a la pobreza que enriquece, a la Vida después de la muerte, al Reino de Dios.
4. Yo no me canso nunca de tratar de relacionarme con Jesús e ir aprendiendo, cada vez más, lo que Él sentía, aquello que comunicaba; cómo Él era, lo que amaba, cómo se relacionaba con las personas; Su entorno, Su cultura, cómo veía las cosas… Para ver las cosas así como las veía Jesús, hace falta cambiar de mentalidad, pensar de otra manera y afrontar la vida desde otra perspectiva. Y esto no es una destinación sino un continuo viajar.
5. «Deja que la Vida se encargue… que sea Ella la que ponga TODO en su sitio justo… que siga su “natural” proceso… Tú, ¡priorízame!» es lo que escucho atento, abriendo los oídos de mi corazón… ¡Primero lo primero!: Seguir Su Voz y hacerle de eco. Ponerme “en camino” con el evidente riesgo que supone la garantía de unas pocas “señales”.
6. Debemos tener siempre nuestros ojos fijos en Jesús, poniendo toda nuestra confianza en Él. Nuestra principal misión es, así, anunciar el Reinado de Dios a todos los que nos rodean, con palabras y con acciones.
7. He conocido –en contrapartida– a algunas personas que dejan todo para el después; de ésas que dicen “me voy a acercar a Dios cuando esté mayor; ahora, primero, voy a disfrutar de la vida”, pero, como dice la canción “¡Yo no sé mañana!”.
8. Éste es uno de los pasajes que menos he entendido, y más me hacen pensar sobre su significado. Este tipo de lecturas –utilizadas de forma interesada– puede hacer que un grupo de fanáticos te inviten a dejar a tu familia y cortar con todo, ya que lo importante solamente es Dios y todo lo demás es secundario. Es de las partes de la Biblia que me hacen dudar entre lo que dijo Jesús realmente y lo que se ha traducido.
9. En todo este proceso de caminar juntos, como comunidad virtual, pude ir descubriendo «lucecitas» que fueron apareciendo a lo largo de este camino, aún en medio de la noche; yo podría decir que son como luciérnagas que me permitieron continuar adelante. Ustedes siguen encendiendo la esperanza en mi vida. Ustedes me ayudan a confiar. De a poco, voy dejando de lado esa manía de querer controlarlo TODO. Ésta siento es mi mayor dificultad a la hora de apostar por algo «MÁS». Seguir manteniendo intimidad con Dios a través de la oración y mayor confianza en la vida serán las claves que me permitan avanzar.
10. Considero que debemos dar a conocer este Proyecto a todas las personas que se cruzan en nuestro camino, sin excepción, pues la Voluntad de Dios es que todos nos salvemos y lleguemos al conocimiento pleno de la Verdad.
AURORA, CARLOS, ÉDGAR, MANUEL, WILMER, MARÍA JOSÉ.
GVJM: APORTACIÓN PARA LA WEB. Tema 32 : “Sígueme” ( Lucas 9, 57 – 62 )
ACERCAMIENTO AL TEXTO
En la primera escena . Se ve interés en seguir a Jesús seguramente impactado e ilusionado por esta novedad en un nuevo estilo de vida que propone, podría ser…
Pero Jesús le advierte que no encontrará seguridad económica, es decir, que no busque éxito social ni económico. Este seguimiento vivido consecuentemente , debería suponer un riesgo porque consiste en remar contra el ambiente social dominante, con lo que exige renuncia y valentía para defender la justicia, vivir austera-mente, etc.
Tal vez , da la impresión , se maravilló de los “milagros” y curaciones y … , pensó ¡ con este hombre “no me pondré enfermo” puesto que me curará inmediatamente …o .. si le habían dicho que era el Mesías , entonces … tendré un lugar “preferencial” en su reino! . No obstante la Sabiduría de Jesús es infinita. Su “ABBA” le ayuda a “leer los pensamientos” de todos los seres humanos …y le previene ( metafóricamente ) de lo que le espera y qué debe decidir libremente si entiende el mensaje ; ¡ una aventura de vida entregada a los demás con sacrificios y desprendimiento de si mismo! . Imagino que el primer joven deslumbrado por el actuar de Jesús con los pobres y oprimidos o al ver sus signos, quiere seguirle, quiere acompañarle en sus recorridos, sin medir lo que conlleva el verdadero seguimiento. Entonces Jesús le hace ver que su seguimiento implica desprendimiento de sí mismo, renuncia y que no es un camino fácil, creo que ese es el sentido de su respuesta.
Es un nuevo discípulo, que como nosotros, quiere entregarse al maestro. Le pide que le guie. Entiendo que Jesús quiere que el candidato no se lleve un desengaño. Piensa en su bien y en que sus expectativas no sean las de un trayecto fácil y cómodo.
En realidad no sé cuál era la actitud. Quizás era una persona que estaba buscando lograr un lugar privilegiado en el “reino del Mesías”. Otros discípulos, Juan y Andrés en algún momento aspiraban sentarse uno a la derecha y el otro a la izquierda. De todas maneras, pareciera como que Jesús sabía que esa persona no podría cumplir lo que estaba aseverando.
En este caso tal vez Jesús sabía que esta persona en realidad no estaba dispuesta a andar por allí, sin una casa, sin una cama cómoda y sin un banquete en cada comida. No lo sé. Quizá pienso, quizá hay veces que realmente se pone muy complicado el camino, pero vale la pena seguirlo. El que se ofrece a Jesús parece muy decidido, con mucha confianza en sus propias fuerzas. Dada la respuesta de Jesús, parece captar que en este seguimiento que se ofrece, se está buscando algún tipo de seguridad, o de beneficio.Jesús no engaña nunca a nadie y es claro desde el principio sobre qué se puede y que no se puede esperar al seguirlo.
En la segunda escena . Parece que se prioriza el estar en la vida cumpliendo los requisitos sociales y quedarse estancado en lo que aporta seguridad y tradición pero Jesús nos ofrece vivir sembrando esperanza y aceptando que el Reino de Dios es lo que colmará nuestras vidas. Quizá en tiempos de Jesús seria diferente lo de enterrar a sus muertos ( sus padres ) y significara atenderles en sus enfermedades y vejez hasta la muerte , creo que Jesús lo presentara como una metáfora y que Jesús tal vez le pidiera que tomara una elección definitiva , como ya encontramos escritos en el evangelio. Jesús pide una entrega total y libre para el verdadero seguimiento del Camino que nos propone. El seguimiento debe ser “a tiempo completo”, una entrega total , con la negación de nosotros mismos , desapego a “lo mundano”, desprendimiento y entrega gratuita a los demás , principalmente a los más necesitados …Hoy, yo encuentro razonable que el joven quiera enterrar a su padre y luego seguir a Jesús, porque la misma escritura nos enseña el respeto y atención a los padres. Para Jesús , en esta parábola, el Reino de Dios es una prioridad y todas los demás intereses deben estar supeditados al establecimiento de este Reino en la tierra. Si uno pone plena confianza en Dios, y sabe que está cumpliendo su misión, tiene que confiar también en que ese Dios se va a ocupar de los suyos. Es muy difícil de comprender para la mente humana en la cultura actual, pero cuando tienes plenamente claro qué es lo que Dios te pide, las otras cosas te parecen banales y menos importantes. “Sígueme” :la elección parte del mismo Jesús, y lo quiere ya ; lo expresa con autoridad y radicalidad , pero a veces se tiene miedo del compromiso, como me puede ocurrir a mí y a otras personas. Jesús quiere decir que lo importante es la Vida, con mayúsculas. Una vida íntegra y comprometida con la ley del Amor. ¿Puede haber algo más importante que eso? Jesús nos invita a vivir sin las idolatrías que al fin y al cabo nos dejan vacíos y esa nueva perspectiva, hay que compartirla, anunciarla. No estoy seguro. Aquí en Paraguay el tema de un entierro dura menos de 24 horas. En otros países como EEUU dura hasta una semana. Quizá esta persona estaba queriendo enterrar a su padre, y luego esperar que se levante la sucesión para recibir su herencia, y bueno, su plan iba a llevar quizá bastante tiempo. Yo creería que Lucas 9 es el comienzo del 3º año de predicación de Jesús. O sea, que estaba a unos pocos meses de su muerte en la cruz. Jesús sabía que ya quedaba poco tiempo como para andar dando vueltas. Creo que para los discípulos de Jesús, el imperativo de dejar todo por el proyecto de Jesús estaba bien claro. Pescadores dejaron sus redes. El cobrador de impuesto dejó su mesa. Jesús mismo dejó su carpintería. No estoy seguro el significado de hoy en día de dejar todo lo que nos da cierto tipo de seguridad, para confiar solo en Jesús. Conozco gente que lo hace, que fueron como misioneros a la India, al África, o a países musulmanes. Pero no estoy seguro si es a esto lo que Jesús se refiere. Hay veces que me cuesta tanto dejar unos minutos el noticiero de la TV. Incluso me cuesta tener unos minutos para completar las lecciones de Grupos de Jesús. Creo que muchas cosas parecen utópicas, pero finalmente Jesús es el Señor que puede hacer que cualquier utopía se pueda hacer realidad.
En la tercera escena . La solicitud de este joven, me parece razonable, dentro de mi forma de pensar. Pero no es admisible dentro de la radicalidad del reino, porque esa despedida puede significar un retroceso.
No es bueno mirar el pasado , pues por un lado ya no lo podemos cambiar y no debemos ni añorarlo, ni lamentarnos por él. El presente es lo único que nos pertenece y debemos vivirlo plenamente, trabajando con todas nuestras fuerzas para que el reino de Dios acontezca en nuestras vidas. La respuesta de Jesús es tajante: si uno decide trabajar por el reino de Dios y siempre está mirando a lo que ha renunciado y quizás añorándolo, no es digno trabajador del reino.
Jesús aclara que la construcción del reino supone el desapego de las ataduras que no nos dejan actuar con entrega para conseguir un mundo mejor.
Para mi el razonamiento sería semejante al de la segunda escena , también la despedida puede ser corta. No entiendo que quiera “volver” con los suyos. Creo que sería lo mínimo que podría hacer antes de seguir a Jesús por vocación.
El reino de Dios se vive en cada instante de la vida, siempre en presente y en su presencia en cualquier lugar y circunstancia que , la voluntad del Que Es, del Espíritu , nos designe vivir , y debemos hacerlo con alegría , santidad y entrega , eso es lo que responde Jesús en la tercera escena , aunque a veces nos pasa, nos surge algo que queremos hacer, que nos apetece, pero ponemos por delante otras necesidades que vemos más importantes, y otras veces al contrario, estamos en un trabajo y decimos: ¿Qué hago aquí haciendo esto, si yo no pinto nada, cuánto mejor estaba haciendo otra cosa?. Para resumir, hay tres factores que me parecen importantes: Plena confianza en él, en los otros y en nosotros mismos. Tener claro que esa es la voluntad de Dios para mi, y a veces no es tan fácil. Disponibilidad, como la virgen: ¡Heme aquí!.
Yo veo que para Jesús la familia no es lo más importante, sino que se nos pide formar una nueva familia, y no son los lazos de sangre precisamente, sino que lo que les une es Jesús que les convoca para vivir en fraternidad, acogiéndose como hermanos y hermanas, hijos e hijas del mismo Padre portadores de la Buena Nueva .
Muchos de nosotros sabemos lo que es vivir según los valores y automatismos heredados por nuestros padres y familiares. La mayor parte de esas vivencias, aun siendo transmitidas desde la mejor de las intenciones, nos han dejado un poso emocional y afectivo del que puede ser difícil liberarse. Jesús nos dice que es un camino largo pero que vale la pena intentarlo. Contamos con su ayuda. Jesús nos da coraje con su testimonio y nos invita a seguir adelante, con fe a pesar de las ataduras, con misericordia a pesar de los errores, con caridad a pesar de las carencias. La promesa del Reino es nuestro motor, nuestra esperanza. Aquí y ahora.
Creo que la idea es esa de “pasar la vida mirando por el retrovisor”. Eso es algo bien peligroso. Los que manejamos sabemos que debemos mirar al retrovisor cada 30 segundos, pero no es posible manejar mirando todo el tiempo lo que ocurre hacia atrás. Si estás arando y miras hacia atrás, el surco va para cualquier lado. Pero sí, muchos entenderán la metáfora de “quedarse llorando sobre la leche derramada”, o sea, lo pasado, pisado.
COLABORACIÓN EN EL PROYECTO DE JESÚS
– A Dios no le podemos atrapar ni encerrar en un nido, o en una madriguera, es decir en nuestras propias ideas o nuestras propias leyes, porque Dios está mucho más por encima de eso y de nuestro pensamiento. Lo que nos puede echar para atrás es el miedo a no ser capaz, el miedo al fracaso, y el querer tenerlo todo asegurado, y que a nosotros nos saquen de nuestra zona de confort, tanto material, como ideológica, y Dios siempre sorprende .
Necesitamos un compromiso interior firme para afrontar las adversidades: rechazo social, incomprensión por parte de familiares y amigos, desarraigo de tradiciones, enfrentarnos a valores predominantes, soledad.
– Yo me doy cuenta de que no hay que apresurarse a ofrecerse a hacer algo, sino que es mejor que me pidan hacerlo. Porque comprendo que , efectivamente la aventura es muy arriesgada y no ofrece nada de lo que el ser humano normalmente busca, al contrario promete pruebas y un camino duro. Además , conforme se va tomando más conciencia de lo que implica el seguimiento real de Jesús, claro que uno lo piensa y mucho, por un lado sabe que va a tener que renunciar a muchas personas y cosas a las que uno está “apegado” y por otro lado siente que no tendrá las fuerzas para poder hacerlo. Reconozco que en mi caso era mucho más fácil cuando creía que seguir a Jesús solo era ir misa, rezar el rosario, confesarse y dar una limosna de vez en cuando.
– ¿ Que si siento la llamada de Jesús a seguirle con más verdad y fidelidad? Sí , y siento una lucha interna muy grande. Por un lado está esa sensación de que debo dar un paso y embarcarme en algún tipo de proyecto para la construcción del Reino y por otra está ese gran temor de estar auto engañándome porque aún no tengo claro en qué y cuándo podría servir y me preocupa al final terminar no haciendo absolutamente nada.
Otro punto que he de confesar también me preocupa es saber que pronto terminaremos este caminar y no habrá excusas.
– En cuanto al seguimiento de la llamada de Jesús, diré que la sentí con fuerza en mi adolescencia. He pasado por diferentes crisis pero sigue latiendo una llama en mi interior, que no quiero dejar que se apague. Esto me lleva a tener cambios en mi vida casi de continuo porque según ocurren las cosas de la vida hay que darle el «estilo» que aprendemos de Jesús. Sí , he ido interiorizando cada vez más el hacer silencio en mi interior y dejarme llenar de Su presencia,(una forma de oración…). Lo que no sé es qué debería hacer para acercar a otras personas al proyecto de Jesús… En mi entorno, hay rechazo e indiferencia, agnosticismo elevado. No quiero invadirles y no sé cómo llegar… ¡¡¡Me siento tan limitada!!!
– Como miedos, siempre les digo a los voluntarios: “No pretendáis controlarlo todo, vosotros confiad en vosotros mismos, en los peregrinos, y en Dios” pero aunque lo repito muchas veces, a mí también a veces me hace falta esa confianza para no dejar que la responsabilidad me coma y acabe quemada.
– En este momento la voz la escucho a lo lejos. Tuve momentos en que atendí, y también di pasos decididos. Podría ser que ya durante algunos años me desvié tras la vanagloria de la vida, y luego de no encontrar allí lo que realmente esperaba, di un paso al costado y me fui convenciendo que esto de seguir a Jesús muy de cerca implicaba muchos riesgos. Fue así que aún escucho a lo lejos la voz, pero hace mucho que me he alejado del compromiso de seguirle de cerca, arriesgando todo. Hay momentos que siento que mi vida debería dar pasos hacia atrás, que ya hace mucho tiempo ocurrió su llamado, y que ahora con casi 49 años, basta con andar a lo lejos, sin involucrarme mucho. Definitivamente creería que es mi fe que va tambaleando. En este momento acabo de pasar varios meses corrigiendo tesis de alumnos de licenciatura. Creería que de alguna manera lo mío es trabajar con esos estudiantes para poner sus pensamientos en orden sobre el papel. Ojalá esto supliera todo lo de seguir a Jesús. Creería que falta que yo ponga mis ideas en orden sobre el papel, y hacer por lo menos un 10% de lo que escribo. Seguramente es un proceso, y hay un texto de San Pablo, que dice, no fui yo quién lo buscó sino que Él me llamó a mí. Quizá falta un nuevo encuentro camino a Damasco. No lo sé. Ya les contaré como voy con el tema de seguir a Jesús. Cuando uno menos cuenta se da, Él está allí de nuevo, llamando mi nombre.
– ¡ Miedo ninguno !. Debilidades sí . Necesito mucha oración y escucha atenta a su Presencia en todo y en tod@s. Le tengo absoluta confianza y reconozco que este GVJM es para mí un gran estímulo y ayuda para orientarme y aprender de Él a través vuestros consejos y reflexiones. También , y personalmente , mi colaboración en el grupo de Jesús presencial que se reúne en mi casa es muy gratificante e intensa . Somos 9 personas con reuniones quincenales muy reflexivas y “sin prisas” … intimamos lo suficiente para tratar de aprehender lo que los textos de los temas propuestos por Pagola nos inducen a reflexionar y tomar decisiones para posibles cambios de vida espiritual , familiar y social.
– Trabajo con los enfermos. Siempre he pensado que esa labor que hacen los grupos visitando en los hospitales a los enfermos que no reciben visitas es muy loable. Es un lugar donde uno está tan triste y asustado que sentir que alguien te toma las manos es ya un consuelo.
Formación de algún grupo pequeño de mujeres en que se siga la dinámica de los Grupos de Jesús, pero que también ofrezca un espacio para hacer un ratito de catarsis (nos hace tanta falta conversar de lo que nos duele, nos preocupa, o soñamos hacer). No sé si esto último es incompatible pero yo lo veo tan necesario.
ORACIONES
“Tú sabes Señor, que mi fe está débil, que el aceite de mi lámpara parece que se va apagando, que pareciera una caña a punto de quebrarse. Ayúdame Señor a poder confiar.”
«Señor Jesús, estoy muy despistada en llegar a las personas alejadas de Tí, para hablarles de tu Buena Noticia. Sopla tu Espíritu para que pueda colaborar en tu Proyecto». Amén.
GVJ MISERICORDIA
De: Iciar Martinez Soriazu , Jesús Fuster Millet , José Humberto Duque, Maria Mecedes Angarita Urdaneta , Marina Saiz Hoz , Puri Ugarte Lopetegui , Reynaldo Reyes Vivó , Xinia Flores Marchena , Lc. Wolfgang Streich BNL.
Te invitamos, querido lector/a, a que leas lo que nos ha suscitado el tema 32 después de haber trabajado y compartido nuestras reflexiones.
ACERCAMIENTO AL TEXTO EVANGÉLICO
En este pasaje evangélico tres personas se presentan o son llamadas por Jesús en sus correspondientes escenas bien diferenciadas. En estas, se establecen tres breves diálogos donde Él les da unas respuestas un tanto enigmáticas; de ellas se desprenden las condiciones para poder ser su discípulo/a. Jesús invita a seguirlo, a colaborar con él en la instauración del Reino de Dios, un mundo fraterno donde impere la paz, la armonía y donde Dios Padre sea todo en cada uno y en todas las cosas. Pero aceptar su invitación conlleva unas exigencias que, a primera vista, pueden parecer hasta poco humanas. Estas exigencias y exclusividades pueden parecer duras, pero con su ayuda «la carga es ligera y el yugo suave». Veamos cada una de ellas:
En la primera escena, un seguidor de Jesús manifiesta a éste que le seguirá a donde vaya. Con esa confesión ¿qué nos quiere decir el seguidor? Que está dispuesto a seguir a Jesús en cualquier circunstancia, ¿pero realmente se da cuenta de lo que dice? ¿Ha podido comprender lo que significa seguir a Jesús? ¿Seguir a donde vaya? ¿Ha comprendido que seguir a Jesús significa darse permanentemente a los demás? Probablemente tiene su propia versión del seguimiento a Jesús, pero por la respuesta que Jesús le da, no parece que haya comprendido lo que realmente significa seguir radicalmente a Jesús. Consideramos que seguirle desde la entrega absoluta es arriesgado porque lo priorizas a Él frente a todo: Frente a tu comodidad, a tu pereza, a tu cansancio,… se trata de tener como guía principal el amor al prójimo, al invisible,… se trata de fijarse, observar y actuar en vez de “no ver”.
En la segunda escena, parece razonable pedir a Jesús que antes de seguirlo le deje ir a enterrar a su padre, pero Jesús pide dar prioridad al mensaje de Dios. Esto quiere decir que ese amor que Jesús nos enseña debe estar por encima de todo y todos, incluso de aquello que pensábamos que era lo primero. Hoy día sería algo así como si Jesús nos ofreciera el Reino de Dios y del camino para hacerlo, y nosotros le contestáramos: ¡uy, perdona, pero no puedo pues tengo algo más importante que hacer.
Esta respuesta también puede significar que nosotros estamos “muertos” cuando anteponemos cosas, personas, trabajos… sin poner realmente nuestro corazón en el anuncio del Reino que es donde encontramos la verdad y vida verdadera.
En la tercera escena, igual que ocurre en la anterior, si miramos literalmente el texto es humanamente razonable. Esta tercera persona quiere volver a los suyos porque no es consciente de conocer a Jesús y lo que significa seguirle. Si eres seguidor de Jesús siempre hay que mirar hacia adelante, no puedes volver la vista atrás porque la historia transcurre de modo lineal, esa línea tiende a encontrarnos con nuestro Padre del Cielo. Volver la vista atrás es ser reticente a avanzar, es victimizarnos, es no creer en la promesa del Señor, pues si creyéramos de verdad no nos quedarían ganas de volver la vista atrás. Es igual que lo que nos pasa comúnmente a nosotros.
ACERCAMIENTO A LA VIDA
+ Últimamente mi ansia más profunda es seguir a Jesús, que Él sea mi camino y mi vida. Le pido con insistencia me haga ver cómo hacer esto realidad en mi quehacer diario, que me dé fuerzas para superar las limitaciones y complicaciones en que vivo inmerso y disperso: una vida demasiado cómoda, sin un compromiso serio por ser testigo suyo y compartir la suerte de aquellos a los que ofreció, con preferencia, el anuncio de su Reino, de su salvación, del amor del Padre.
+ Creo que para ver luz, antes que seguirlo, me hace falta levantarme y mirar arriba. Sí, más que “sígueme” resuena en mí “levántate”. Me llega más esta palabra, pues no puedo seguirlo si aún no me he levantado. Así que ahí estoy, sentada y aletargada todavía. Y bueno, lo que veo positivo es que no me despego de Él.
+ Quería comentaros la cantidad de cosas que son un obstáculo para seguir al Señor «haciendo». Como todos, yo también tengo las mías. Pero eso hace tiempo que dejo de preocuparme. Yo nunca he programado nada, el Señor ha ido llevándome a donde quería que estuviese. La cuestión es la disponibilidad y la oración. Con esa confianza voy a donde sea. Claro está que yo tengo que poner todo de mi parte y prepararme lo mejor posible. El resto depende de Dios. Algunas veces parece que las cosas no salen bien. El tiempo te demuestra que Él puso lo que faltaba y la cosa salió mucho mejor de lo que parecía.
+ Siento la llamada de Jesús. Llamada a ser su seguidor. Un seguidor cada vez más comprometido. Un seguidor de Jesús y del evangelio. Y ser seguidor de Jesús me compromete sólo a una cosa: A amar a los demás. Y creo que amar a los demás es un camino en el que el amor que sienta por los demás irá aumentando poco a poco. A medida que aumente el amor hacia los demás, irán disminuyendo mis egoísmos y mi necesidad de seguridades.
+ Creo que es urgente dar a conocer y acercar al proyecto humanizador del reino de Dios a toda persona que tengamos oportunidad de interactuar empezando por los más cercanos porque los más cercanos van a ser quienes nos ayuden a que seamos coherentes.
+ El seguimiento a Jesús es algo muy importante para los discípulos de Jesús. “Sígueme” implica una metáfora de movimiento, no sólo en línea recta sino saber caminar con los demás seguidores, los compañeros son muy importantes, para sentirnos muy unidos a otros y no desorientados…
+ Para seguir a Jesús con más verdad y fidelidad tengo que seguir adelante en este camino: Tengo que seguir trabajando la confianza en él, la oración, su búsqueda, la misericordia, la esperanza,… tratar de resistirme ante el egoísmo, el individualismo, la pereza… no creo que todo esto se logre de un día para otro y tampoco llegará el día en que se consiga totalmente. La clave está en seguir caminando, seguir hacia adelante aunque de vez en cuando nos tropecemos y retrocedamos un poco. No olvidarnos de Dios y su ejemplo en Jesús.
+ Ahora mismo aparentemente no tengo miedos resistencias o debilidades para escuchar esta llamada. Hace tiempo decidí seguirle con todos mis miedos, resistencias y debilidades, esto es lo que hace que lo sigamos, la necesidad de curarnos de todo esto. Pero poco a poco han ido disipándose estos miedos. Es un proceso que creo que no tiene fin mientras vivamos, de ahí la palabra “Sígueme”, siempre podemos dar un pasito más.
ANA VILMA, ANTONIO, FRANCIS, ISABEL, JAVIER, LUCILA, MARGALIDA, MARIVI, RICARD
“SIGUEME”, es un imperativo afectuoso, una invitación a seguirle. No es una imposición, pero sí una propuesta que espera una respuesta con una decisión sin condiciones, sin medias tintas.
Tenemos que abandonar “seguridades”, soltar “amarras”; dejar de lado los miedos y los apegos.
Seguirle no es fácil. Permanecer firmes afrontando todo lo que nos pide; nos cuesta. Por eso flaqueamos. Puede parecer a veces una carga pesada, pero sin embargo, se trata de Libertad .El Reino está compuesto de hombres libres, que trabajan para hacer libres a los demás.
Seguirle, implica DISPONIBILIDAD, saber escuchar, estar atentos, atendiendo al momento presente y viviendo a tope la unidad y el amor.
Implica también DESAPEGO, de todas nuestras “seguridades “; ABANDONO y CONFIANZA.
Una vez que Él nos llama y nosotros le hemos atendido, ya no hay vuelta atrás; no se puede ir por la vida mirando para otro lado, no se puede mirar a los demás, sin verle a Él, ni podemos seguir sordos a su palabra.
“¡SIGUEME!”: lo más liberador de todo, es que eso que llamamos Yo- mi- me- …no tiene importancia ni merece la pena dedicarle más tiempo que el estrictamente necesario…
Y entonces…. ¡El nos libera!
En este texto se nos presentan tres tipos de personas que pretenden seguir a Jesús.
El primero se ofrece a seguirle desde su propia iniciativa. No sabe bien a lo que se compromete.
La actitud del que se ofrece a seguir a Jesús es de admiración y generosidad a su persona, pero lamentablemente sin saber los costes o riesgos que conllevar tomar esa decisión de seguirle
Ya se ha dejado seducir por Jesús y con entusiasmo y emotividad declara:
“Te seguiré a donde vayas”.
Y el Maestro con su respuesta lo llama a la reflexión, a la interiorización de lo que significa seguirlo: cambio, transformación en el estilo de vida propio y asumir el de Jesucristo, convivir con Él y vivir como Él.
Jesús le hace conocer la realidad de su vida, “sin tener dónde reclinar la cabeza”.
Así debía de manifestarse Jesús en esos tres años en los que estuvo difundiendo su mensaje de Amor….Un joven serio, riguroso consigo mismo, dotado de una compasión impresionante ..y a la vez fiel a su destino final.
Ese Jesús que se muestra lleno de compasión, una compasión salvaje hacia los más necesitados.. pero que en ocasiones se muestra también con una determinación y un rigor que impresionaba.. ….
Le entró miedo…ese miedo que nos paraliza cuando la vida nos presenta algo que creemos superior a nuestras propias fuerzas…Y abandonó..
En los dos otros diálogos,
Es el mismo Jesús que llama, ¡¡¡que privilegio!!!, la llamada es clara, concisa, contundente, …: sígueme; dejar todo para ir con Él a “anunciar el Reino de Dios”, seguirle solo a ÉL, sin opciones, sin excusas, sin peros, sin dobleces, … Él al mismo tiempo proporciona respuesta a las inquietudes.
La iniciativa parte del conocimiento y del encuentro con Él, dos personas que le acompañaban, que le conocían personalmente, conocían sus obras y querían seguirle.
-Te seguiré, Señor pero déjame primero ir a enterrar a mi padre.
-Te seguiré, Señor; pero déjame primero despedirme de mi familia.
.. Quieren resolver primero temas personales y ponen excusas, pero Jesús les dice que tienen que ir con él incondicionalmente y sin pretextos, con total disponibilidad..
Seguir a Jesús si que es una aventura arriesgada ya que por el camino encontrarán muchas dificultades :
…No siento en mi interior la llamada a seguir a Jesús porque estoy sumida en mis problemas y realidad que a veces es más fuerte que su llamada…
….la autosuficiencia, me basto a mí mismo, no necesito de nadie ni de nada, me creo fuerte, seguro y cargado de razones, soy yo ley y medida de todas las cosas, nada ni nadie va a tener que decirme quién soy yo y qué tengo que hacer…
.. Tuve que experimentar mi pobreza y mi impotencia hasta que Él me hizo cambiar la perspectiva de mi vida.. “Aunque camine por sendas oscuras, nada temo, porque Tú vas conmigo” …
Por esto también entré en este grupo de Emaús, para “redescubrir la persona de Jesús y su llamada al seguimiento”, desde este itinerario de Pagola.
Y me está ayudando, y me estáis ayudando todos con vuestros comentarios
…Soy consciente que soy vasija de barro, sé que le necesito y sé dónde encontrarle.
…Despojarse y liberarse de todo apego y disponerse y comprometerse a trabajar en y por la misión al servicio del anuncio del Reino de Dios.
…Tienes que hacer un trabajo previo…Libérate de ti mismo…despójate de todos los apegos de tu corazón…así y solo así podrás ofrecerle a Jesús tu disponibilidad total
CONVERSIÓN PERSONAL
Estoy segura de que Él mismo nos va abriendo caminos. Nuestros pequeños gestos, esas pequeñas semillas, Él mismo las convierte en frutos
Nosotros somos conscientes de ello, sabemos dónde encontrarle y sabemos que podemos formar parte de SU sueño, poner todo a su servicio, para que Él reine, de esta forma reinará en el mundo el amor, la misericordia, la paz, la justicia de Dios, que no la justicia de los hombres, …, el perdón, ….
Jesús Resucitado, uno con Dios Padre, que es el mismo que recorrió los caminos de Galilea, pero que ahora, quiere recorrer en nosotros y con nosotros los caminos de nuestro tiempo
El Amor incondicional de Dios y su misericordia entrañable, de donde brota todo compromiso
…Me propongo orar asiduamente a Dios… por todas las personas que sirven en el área de la salud, que atienden a enfermos en tan diferentes condiciones físicas, de edad y sociales para que siempre lo hagan con amor, compasión y alegría y para que cuando se sientan cansados y fatigados, también ellos encuentren comprensión y misericordia en nosotros, los pacientes que a veces somos tan «impacientes».
…Los que hemos conocido a Jesús y su mensaje nos sentimos invitados por Él a “seguirle”, es decir, a dejarle entrar en nuestra vida..
con decisión, sin “volver la vista atrás”.
de modo que sea Él quien la dirija y nos guíe por sus caminos de compasión, justicia y amor incondicional a todos…
…»Sígueme» es siempre un aldabonazo en mi vida no sólo por las dificultades personales para responder a esa llamada, sino también por las dificultades para ayudar a otros a creer: ser discípulos misioneros sigue siendo uno de los retos que hoy tengo/tenemos en nuestras vidas como seguidores de Jesús.
COMPROMISO GRUPAL EN EL PROYECTO DE JESÚS
Nosotros Emaús, que vamos caminando juntos en el seguimiento a Jesús , comprometámonos a contemplar al Maestro en las acciones positivas, solidarias y fraternas de los demás en nuestro diario vivir y que así mismo nuestros gestos, actitudes y acciones reflejen la decisión que hemos tomado de seguir a Jesucristo y asumir su estilo de vida: obedecer la voluntad del Padre, amar y servir. Orar los unos por los otros para que con la ayuda del Espíritu Santo, ello nos sea posible a pesar de nuestras debilidades.
ORACIÓN
Necesitamos Señor, recuperar un nuevo corazón
Necesitamos Señor, volver a renovar Tu llamada que nos llama a seguirte, caminar CONTIGO de manera incondicional y sin reservas en la construcción de Tu Reino.
Que no tengamos que decir hoy, lo mismo que mañana:
…»4NJT7mañana te seguiré».
Es muy difícil seguir a Jesús, pero con él todo es posible, necesitamos de él, la ayuda de él.
Señor, ayúdame para ser un fiel discípulo tuyo. Amén.