EXCLUÍDOS
Bendito seas por siempre.
Tu amor es infinito
por curar a enfermos,
excluidos y oprimidos.
Los humanos muchas veces
excluimos a los hermanos,
acabamos por marginar
humillando, rechazando.
Pero, Padre Bueno, tu ley
es ley divina, del cielo.
Es inmenso amor puro
a quien carece de afecto.
Oh, amo tus actos, Jesús
y tus palabras, Dios Santo.
Haz que yo mis manos tienda
a quien sufre a mi lado.
Jesús Díaz Insúa
Grupo de Jesús – A Coruña
Jesús, te felicito, muy bonitos tus versos. En poesía es más sonora la oración.