CONTRIBUIR A LA CONVERSIÓN DE LA IGLESIA
No son pocos los que se han alejado de la fe, escandalizados o decepcionados por la actuación de una Iglesia que, según ellos, no es fiel al evangelio ni actúa en coherencia con lo que predica. También Jesús criticó con fuerza a los dirigentes religiosos: «No hacen lo que dicen». Solo que Jesús no se quedó ahí. Siguió buscando y llamando a todos a una vida más digna y responsable ante Dios.
A lo largo de los años, también yo he podido conocer, incluso de cerca, actuaciones de la Iglesia poco coherentes con el evangelio. A veces me han escandalizado, otras me han hecho daño, casi siempre me han llenado de pena. Hoy, sin embargo, comprendo mejor que nunca que la mediocridad de la Iglesia no justifica la mediocridad de mi fe.
La Iglesia tendrá que cambiar mucho, pero lo importante es que cada uno reavivemos nuestra fe, que aprendamos a creer de manera diferente, que no vivamos eludiendo a Dios, que sigamos con honestidad las llamadas de la propia conciencia, que cambie nuestra manera de mirar la vida, que descubramos lo esencial del evangelio y lo vivamos con gozo.
La Iglesia tendrá que superar sus inercias y miedos para encarnar el evangelio en la sociedad moderna, pero cada uno hemos de descubrir que hoy se puede seguir a Cristo con más verdad que nunca, sin falsos apoyos sociales y sin rutinas religiosas. Cada uno hemos de aprender a vivir de manera más evangélica el trabajo y la fiesta, la actividad y el silencio, sin dejarnos modelar por la sociedad, y sin perder nuestra identidad cristiana en la frivolidad moderna.
La Iglesia tendrá que revisar a fondo su fidelidad a Cristo, pero cada uno hemos de verificar la calidad de nuestra adhesión a él. Cada uno hemos de cuidar nuestra fe en el Dios revelado en Jesús. El pecado y las miserias de la institución eclesial no me dispensan ni me desresponsabilizan de nada. La decisión de abrirme a Dios o de rechazarlo es solo mía.
La Iglesia tendrá que despertar su confianza y liberarse de cobardías y recelos que le impiden contagiar esperanza en el mundo actual, pero cada uno somos responsables de nuestra alegría interior. Cada uno hemos de alimentar nuestra esperanza acudiendo a la verdadera fuente.
José Antonio Pagola
Cuando las noticias nos golpean directamente en nuestro corazón, cuando la cobardía de nuestra iglesia en reconocer el dolor infligido a much@s se silencia, nos queda la mirada de Jesús. ¿Cómo hablar de ti? ¿Cómo gritar a los cuatro vientos que solo tú eres la luz de nuestra vida?
Escribo este comentario comenzando noviembre de 2023, en medio de un mundo muy convulsionado como nunca lo había percibido en mi ya larga vida de 75 años. Por donde mire hay guerras, maldad, crueldad y mentiras y me invade una permanente sensación de temor y desconfianza, por lo cual permanezco en un cansador estado de alerta… En medio de todo esto me he encontrado con los grupos de Jesús y de inmediato me he adherido a ellos como lo haría el sediento al agua, pero surge la dificultad de que intento hacer silencio en mi cabeza para poder conectar con Jesús y el torrente de imparables pensamientos ansioso me lo impide absolutamente.
Tengo la intención de formar un grupo para ver si eso me ayuda, pero me topo con que a nadie de los que conozco le interesa el tema y sigo empantanado sin conectar con quien más quiero, Jesús.
«ESCUCHAR LA PALABRA Y PONERLA EN PRACTICA»
RETIRO MES DE NOVIEMBRE
Semana primera: 30 oct-05 nov 2023
OBJETIVO: CONTEMPLAR EL MISTERIO DE LA ENCARNACIÓN
(Jn 1,14).
AÑO LITÚRGICO 2022-2023 CICLO A
31º. Domingo del Tiempo Ordinario
San Mateo 23, 1-12
“Ellos dicen, pero no hacen”
PREPARACION EN CASA.
Dedica el momento más oportuno, en el que te encuentres en paz y no tengas muchas ocupaciones y que tampoco te encuentres muy cansado(a).
SILENCIO.
Elige un lugar apropiado donde puedas escuchar y orar sin distracción alguna: tu habitación o estudio, un sitio donde haya SILENCIO y no te interrumpan y así obtener el SILENCIO interior que necesitas.
Entra en la presencia de Dios y cierra la puerta a otros pensamientos. SILENCIO. Ora despacio; que cada palabra salga de tu corazón.
Quien desee puede enviar a todos por escrito su reflexión o comentario a la meditación de cada semana.
En el encuentro virtual último jueves de noviembre, compartir lo que haya tocado nuestro corazón o llamado especialmente la atención.
II SEÑAL DE LA CRUZ Y ORACIÓN INICIAL PARA BAJAR EL VOLUMEN DE LO QUE OCURRE A TU ALREDEDOR Y CONECTAR CON TU INTERIOR, PARA PEDIR SILENCIO Y ESCUCHAR A DIOS…
SILENCIO
Ayúdame a hacer silencio, Señor,
quiero escuchar tu voz.
Toma mi mano, guíame al desierto,
que nos encontremos a solas, Tú y yo.
Necesito contemplar tu rostro,
me hace falta la calidez de tu voz,
caminar juntos…
callar para que hables Tú.
Me pongo en tus manos,
quiero revisar mi vida,
descubrir en qué tengo que cambiar,
afianzar lo que anda bien,
sorprenderme con lo nuevo que me pides.
Me tienta creer que te escucho,
cuando escucho mi voz.
¡Enséñame a discernir!
Dame luz para distinguir tu rostro.
Llévame al desierto Señor,
despójame de lo que me ata,
sacude mis certezas y pon a prueba
mi amor para empezar de nuevo,
con humildad, sencillez, fuerza
y Espíritu para vivir fiel a Ti.
Por el P. Javier Leoz
III MEDITACION PRIMERA SEMANA: Contemplar la Encarnación del Verbo en la historia.
3.1 VER: En mi historia o biografía PERSONAL (familia, contexto socio/político y religioso: traer a la memoria y CONTAR hechos más significativos. SILENCIO y poner por escrito)
*Leer, releer, subrayar y meditar/orar:
La Encarnación del Verbo está situada en el tiempo y en el espacio, tuvo lugar en unas circunstancias concretas de nuestra historia:
-“Sucedió en aquellos días que salió un decreto del emperador Augusto ordenando que se empadronase todo el Imperio. Este primer empadronamiento se hizo siendo Cirino gobernador de Siria” (Lc 2,1-2).
SILENCIO
-Quiso Dios poner su tienda entre nosotros y para ello envió a su Hijo en una carne como la nuestra:
“Y el Verbo se hizo carne y habitó entre nosotros” (Jn 1,14).
“El Hijo de Dios trabajó con manos de hombre, pensó con inteligencia de hombre, obró con voluntad de hombre, amó con corazón de hombre. Nacido de la Virgen María se hizo verdaderamente uno de los nuestros, semejante en todo a nosotros excepto en el pecado” (Gaudium et Spes 22).
SILENCIO
Recuerda, si lo deseas, poner por escrito y compartir con todos, tu meditación o reflexión, lo que llega a tu corazón y/o sientes que te dice el Señor…
IV ACERCAMIENTO AL EVANGELIO.
IV.1 Introducción.
“Ellos dicen, pero no hacen”
El evangelio nos presenta las controversias de Jesús con los distintos grupos de judíos que rechazaban sus enseñanzas. Leían la Biblia, que ellos llamaban la Torá, pero no ponían en práctica sus enseñanzas. De este modo, también podemos decir que las actitudes denunciadas por Jesús, hoy en el Evangelio, las vemos cotidianamente a nuestro alrededor. “Decir y no hacer” es, muchas veces, un estilo que se encuentra muy presente en la sociedad de hoy.
¿Cuántas veces podrían llamarnos fariseos? ¿Cuántas veces somos expertos en decir lo que los demás tienen que hacer y sin embargo nosotros no hacemos nada? ¿Cuántas veces exigimos que el otro obre de tal o cual manera, sin mirarnos primero nosotros, sin exigirnos nada? ¿Cuántas veces incluso, somos cristianos solo para la “selfie” … para mostrarnos?
Hoy cuestionémonos un poquito como cristianos: ¿Qué estoy diciendo con mi vida? ¿Qué se expresa con mi manera de obrar?
IV.2 Lectura del Santo Evangelio según San Mateo (23, 1-12)
Jesús dijo a la multitud y a sus discípulos: “Los escribas y fariseos ocupan la cátedra de Moisés; ustedes hagan y cumplan todo lo que ellos les digan, pero no se guíen por sus obras,
porque no hacen lo que dicen.
Atan pesadas cargas y las ponen sobre los hombros de los demás, mientras que ellos no quieren moverlas ni siquiera con el dedo.
Todo lo hacen para que los vean: agrandan las filacterias y alargan los flecos de sus mantos;
les gusta ocupar los primeros puestos en los banquetes y los primeros asientos en las sinagogas,
ser saludados en las plazas y oírse llamar ‘mi maestro’ por la gente.
En cuanto a ustedes,
-no se hagan llamar ‘maestro’, porque no tienen más que un Maestro y todos ustedes son hermanos.
-A nadie en el mundo llamen ‘padre’, porque no tienen sino uno, el Padre celestial.
-No se dejen llamar tampoco ‘doctores’, porque sólo tienen un Doctor, que es el Mesías.
Que el más grande de entre ustedes se haga servidor de los otros, porque el que se ensalza será humillado, y el que se humilla será ensalzado”.
Palabra del Señor
Leer y releer la Palabra.
SILENCIO
IV.3 ¿Qué dice o/y cuenta el evangelio?
Comentarios
1. GRUPOS DE JESUS
“CONTRIBUIR A LA CONVERSIÓN DE LA IGLESIA”. J. A. Pagola
https://www.gruposdejesus.com/31-tiempo-ordinario-a-mateo-231-12/
2.DOMINICOS
“EL PRIMERO DE VOSOTROS SERÁ VUESTRO SERVIDOR” Fray Miguel de Burgos Núñez. (1944-2019)
https://www.dominicos.org/predicacion/homilia/5-11-2023/comentario-biblico/miguel-de-burgos-nunez/
3. JESUITAS CONFERENCIA DE PROVINZALES EN AMÉRICA LATINA Y DEL CARIBE.
“Erradicar la hipocresía de nuestra vida” Por: Gustavo Albarrán, SJ.
https://jesuitas.lat/noticias/15-nivel-2/3577-erradicar-la-hipocresia-de- nuestra-vida-mateo-23-1-12
Puesta en común. Retiro y Evangelio (enviar quien lo desee a todos).
MIRANDO A NUESTRA VIDA: LLAMADAS A LA ACCIÓN, GRACIAS, COMPROMISOS, …
– ¿Qué me dice a mí el evangelio? ¿Qué buena noticia me anuncia o revela hoy el evangelio?
SILENCIO
¿Qué respuesta me pide a mí el Señor? llamadas a la conversión, compromisos, acción de gracias, peticiones, …, para ser Discípulo Misionero.
V. ORACIÓN DE LOS FIELES.
Pidamos al Señor que escuche nuestras oraciones y nos conceda el auxilio que necesitamos. Unámonos diciendo, Dios de amor, escúchanos.
Por la Iglesia, para que se purifique interiormente y dé testimonio de lo que predica, sirviendo con humildad. Roguemos al Señor…. R/Dios de amor, escúchanos.
Por los gobernantes de las naciones, para que sepan aceptar humildemente las críticas y trabajen honestamente por el bien de su pueblo. Roguemos al Señor… R/Dios de amor, escúchanos.
Por nuestra comunidad, para que seamos sinceros unos con otros, comprensivos con todos, sin pretender ser más que los demás. Roguemos al Señor… R/Dios de amor, escúchanos.
Por los enfermos y ancianos, para que reciban nuestra ayuda y consuelo no solamente espiritual sino humano y fraternal. Roguemos al Señor… R/Dios de amor, escúchanos.
Por cada uno de nosotros aquí reunidos, celebrando la Eucaristía, para que cada día seamos más humildes, aceptemos a los demás sin reparos y reconozcamos nuestras limitaciones. Roguemos al Señor… R/Dios de amor, escúchanos.
Ante ti, nuestro Padre y nuestro único Dios y Señor, confesamos que nosotros pertenecemos a los que dicen y no hacen. Fortalece con tu Espíritu a los servidores de tu pueblo, para que la palabra que anuncian se haga verdad en ellos. Haz, Señor, que nuestro ejemplo evangélico de amor humilde y de fraternidad sincera robustezca a los vacilantes en la fe, para que, guiados por tu Espíritu, caminemos juntos como hermanos con el corazón ensanchado por el camino de tu verdad. Amén
VI. PADRE NUESTRO, AVE MARÍA Y GLORIA.
SILENCIO
VII. BENDICIÓN FINAL
El Señor te bendiga
y te guarde;
te muestre Su faz
y tenga misericordia de ti.
Vuelva su rostro a ti
y te dé la Paz.
El Señor te bendiga, hermano, hermana.
SILENCIO
VIII. LITURGIA DE LA PALABRA DEL DOMINGO
https://www.ciudadredonda.org/calendario-lecturas/liturgia-del-domingo
IX. INFORMACIÓN, RUEGOS Y PREGUNTAS
000discipulosmisioneros@gmail.com
PAZ, ALEGRÍA Y FRATERNIDAD