EN DEFENSA DE LA MUJER
Lo que más hacía sufrir a las mujeres en la Galilea de los años treinta del siglo I era su sometimiento total al varón dentro de la familia patriarcal. El esposo las podía incluso repudiar en cualquier momento abandonándolas a su suerte. Este derecho se basaba, según la tradición judía, nada menos que en la ley de Dios.
Los maestros discutían sobre los motivos que podían justificar la decisión del esposo. Según los seguidores de Shammai, solo se podía repudiar a la mujer en caso de adulterio; según Hillel, bastaba que la mujer hiciera cualquier cosa «desagradable» a los ojos de su marido. Mientras los doctos varones discutían, las mujeres no podían elevar su voz para defender sus derechos.
En algún momento, el planteamiento llegó hasta Jesús: «¿Puede el hombre repudiar a su esposa?». Su respuesta desconcertó a todos. Las mujeres no se lo podían creer. Según Jesús, si el repudio está en la ley, es por la «dureza de corazón» de los varones y su mentalidad machista, pero el proyecto original de Dios no fue un matrimonio «patriarcal» dominado por el varón.
Dios creó al varón y a la mujer para que fueran «una sola carne». Los dos están llamados a compartir su amor, su intimidad y su vida entera, con igual dignidad y en comunión total. De ahí el grito de Jesús: «Lo que ha unido Dios, que no lo separe el varón» con su actitud machista.
Dios quiere una vida más digna, segura y estable para esas esposas sometidas y maltratadas por el varón en los hogares de Galilea. No puede bendecir una estructura que genere superioridad del varón y sometimiento de la mujer. Después de Jesús, ningún cristiano podrá legitimar con el evangelio nada que promueva discriminación, exclusión o sumisión de la mujer.
En el mensaje de Jesús hay una predicación dirigida exclusivamente a los varones para que renuncien a su «dureza de corazón» y promuevan unas relaciones más justas e igualitarias entre varón y mujer. ¿Dónde se escucha hoy este mensaje?, ¿cuándo llama la Iglesia a los varones a esta conversión?, ¿qué estamos haciendo los seguidores de Jesús para revisar y cambiar comportamientos, hábitos, costumbres y leyes que van claramente en contra de la voluntad original de Dios al crear al varón y a la mujer?
José Antonio Pagola
ESCUCHAR LA PALABRA Y PONERLA EN PRÁCTICA
Encuentro virtual jueves 3 de octubre a las 21 h. Madrid
Evangelio del domingo XXVII DEL TIEMPO ORDINARIO
Año litúrgico 2023-2024 (Ciclo B) – Mc 10, 2-16
“…quien no reciba el reino de Dios como un niño, no entrará en él».
I. SEÑAL DE LA CRUZ Y ORACIÓN INICIAL
Para pedir el don de comprender el Evangelio y poder conocer y amar a Jesucristo y, de este modo, poder seguirle mejor y darlo a conocer.
II. ¿CÓMO Y DÓNDE ESTAMOS?
Citar algún hecho significativo de la vida desde el último encuentro, teniendo en cuenta la Palabra que hoy escuchamos.
III. ACERCAMIENTO AL EVANGELIO
Llegan a ser uno
Las primeras páginas de la Biblia nos dicen que Dios creó al hombre y a la mujer a su imagen y semejanza. Eso quiere decir que Dios, que es amor, quiso unirlos con el vínculo del amor, y hacerles vivir por y con amor mutuo. Así era al principio. Y así debería ser hasta ahora. –Cuando Jesús vino, hizo el vínculo entre esposos y esposas todavía más sagrado, asegurándoles la gracia de Dios. — ¿Son los esposos fieles a su sí dado en la presencia de Dios y en la Iglesia? Pidamos hoy al Señor fidelidad y profundo amor para nuestros matrimonios – y también para todas nuestras amistades.
Que nuestro amor perdure
El deseo ardiente del esposo y la esposa en el día de su matrimonio es: ¡Que nuestro amor no se marchite; que dure! Esto no es solamente un deseo de Dios para ellos, sino que es su mismísimo mandamiento.
Dios quiere que la unión de los esposos en amor sea como su propio amor hacia su pueblo: fiel, fuerte, perenne, una verdadera alianza de amor. Con todos los matrimonios, con todos aquellos a quienes la amistad vincula juntos, con todas nuestras comunidades cristianas, estamos hoy ante el Señor y le pedimos: Que nuestro amor, de los unos a los otros, sea fuerte, fiable, fiel.
Lectura del santo Evangelio según san Marcos (10, 2-16)
En el plan de Dios el matrimonio es, más allá de legalismos humanos, una unión inquebrantable de amor y fidelidad. El amor del esposo y la esposa se perpetuará vivo en sus hijos.
Nota: Ver el capítulo 10 de Marcos. He señalado en amarillo el evangelio del domingo 6 de octubre.
Capítulo 10
1 Y desde allí se marchó a Judea y a Transjordania; otra vez se le fue reuniendo gente por el camino y según su costumbre les enseñaba.2Acercándose unos fariseos, le preguntaban para ponerlo a prueba: «¿Le es lícito al hombre repudiar a su mujer?».3 Él les replicó: «¿Qué os ha mandado Moisés?». 4 Contestaron: «Moisés permitió escribir el acta de divorcio y repudiarla». 5 Jesús les dijo: «Por la dureza de vuestro corazón dejó escrito Moisés este precepto. 6 Pero al principio de la creación Dios los creó hombre y mujer. 7 Por eso dejará el hombre a su padre y a su madre, se unirá a su mujer 8 y serán los dos una sola carne. De modo que ya no son dos, sino una sola carne. 9 Pues lo que Dios ha unido, que no lo separe el hombre». 10 En casa, los discípulos volvieron a preguntarle sobre lo mismo. 11 Él les dijo: «Si uno repudia a su mujer y se casa con otra, comete adulterio contra la primera. 12 Y si ella repudia a su marido y se casa con otro, comete adulterio».
13 Acercaban a Jesús niños para que los tocara, pero los discípulos los regañaban. 14 Al verlo, Jesús se enfadó y les dijo: «Dejad que los niños se acerquen a mí: no se lo impidáis, pues de los que son como ellos es el reino de Dios. 15 En verdad os digo que quien no reciba el reino de Dios como un niño, no entrará en él». 16 Y tomándolos en brazos los bendecía imponiéndoles las manos.
17Cuando salía Jesús al camino, se le acercó uno corriendo, se arrodilló ante él y le preguntó: «Maestro bueno, ¿qué haré para heredar la vida eterna?».18Jesús le contestó: «¿Por qué me llamas bueno? No hay nadie bueno más que Dios.19Ya sabes los mandamientos: no matarás, no cometerás adulterio, no robarás, no darás falso testimonio, no estafarás, honra a tu padre y a tu madre».20Él replicó: «Maestro, todo eso lo he cumplido desde mi juventud».21Jesús se quedó mirándolo, lo amó y le dijo: «Una cosa te falta: anda, vende lo que tienes, dáselo a los pobres, así tendrás un tesoro en el cielo, y luego ven y sígueme».22A estas palabras, él frunció el ceño y se marchó triste porque era muy rico
.23Jesús, mirando alrededor, dijo a sus discípulos: «¡Qué difícil les será entrar en el reino de Dios a los que tienen riquezas!».24Los discípulos quedaron sorprendidos de estas palabras. Pero Jesús añadió: «Hijos, ¡qué difícil es entrar en el reino de Dios!25Más fácil le es a un camello pasar por el ojo de una aguja, que a un rico entrar en el reino de Dios».26Ellos se espantaron y comentaban: «Entonces, ¿quién puede salvarse?».27Jesús se les quedó mirando y les dijo: «Es imposible para los hombres, no para Dios. Dios lo puede todo».28Pedro se puso a decirle: «Ya ves que nosotros lo hemos dejado todo y te hemos seguido».29Jesús dijo: «En verdad os digo que no hay nadie que haya dejado casa, o hermanos o hermanas, o madre o padre, o hijos o tierras, por mí y por el Evangelio,30que no reciba ahora, en este tiempo, cien veces más —casas y hermanos y hermanas y madres e hijos y tierras, con persecuciones— y en la edad futura, vida eterna.31Muchos primeros serán últimos, y muchos últimos primeros
».32Estaban subiendo por el camino hacia Jerusalén y Jesús iba delante de ellos; ellos estaban sorprendidos y los que lo seguían tenían miedo. Él tomó aparte otra vez a los Doce y empezó a decirles lo que le iba a suceder:33«Mirad, estamos subiendo a Jerusalén, y el Hijo del hombre va a ser entregado a los sumos sacerdotes y a los escribas; lo condenarán a muerte y lo entregarán a los gentiles34se burlarán de él, le escupirán, lo azotarán y lo matarán; y a los tres días resucitará».
35Se le acercaron los hijos de Zebedeo, Santiago y Juan, y le dijeron: «Maestro, queremos que nos hagas lo que te vamos a pedir».36Les preguntó: «¿Qué queréis que haga por vosotros?».37Contestaron: «Concédenos sentarnos en tu gloria uno a tu derecha y otro a tu izquierda».38Jesús replicó: «No sabéis lo que pedís, ¿podéis beber el cáliz que yo he de beber, o bautizaros con el bautismo con que yo me voy a bautizar?».39Contestaron: «Podemos». Jesús les dijo: «El cáliz que yo voy a beber lo beberéis, y seréis bautizados con el bautismo con que yo me voy a bautizar,40pero el sentarse a mi derecha o a mi izquierda no me toca a mí concederlo, sino que es para quienes está reservado».41Los otros diez, al oír aquello, se indignaron contra Santiago y Juan.42Jesús, llamándolos, les dijo: «Sabéis que los que son reconocidos como jefes de los pueblos los tiranizan, y que los grandes los oprimen.43No será así entre vosotros: el que quiera ser grande entre vosotros, que sea vuestro servidor;44y el que quiera ser primero, sea esclavo de todos.45Porque el Hijo del hombre no ha venido a ser servido, sino a servir y dar su vida en rescate por muchos»
46Y llegan a Jericó. Y al salir él con sus discípulos y bastante gente, un mendigo ciego, Bartimeo (el hijo de Timeo), estaba sentado al borde del camino pidiendo limosna.47Al oír que era Jesús Nazareno, empezó a gritar: «Hijo de David, Jesús, ten compasión de mí».48Muchos lo increpaban para que se callara. Pero él gritaba más: «Hijo de David, ten compasión de mí».49Jesús se detuvo y dijo: «Llamadlo». Llamaron al ciego, diciéndole: «Ánimo, levántate, que te llama».50Soltó el manto, dio un salto y se acercó a Jesús.51Jesús le dijo: «¿Qué quieres que te haga?». El ciego le contestó: «Rabbuní, que recobre la vista».52Jesús le dijo: «Anda, tu fe te ha salvado». Y al momento recobró la vista y lo seguía por el camino.
Palabra del Señor
Leo/leemos el texto. Después contemplo y subrayo; comentarios…
SILENCIO
Anoto lo que descubro de JESÚS y la BUENA NOTICIA que escucho…:
qué cuenta el Evangelio; su Buena Noticia…
qué me llama la atención… por qué.
SILENCIO
Iluminándonos en el evangelio de Marcos respondemos a la pregunta ¿Cómo Jesús, encarnado hace 2025 años, es esperanza de paz para el mundo?
(Ahondamos en su profundo significado y en sus potenciales frutos que nos han iluminado en estos veintiún siglos, nos ilumina hoy, e iluminara siempre a cada ser humano en las encrucijadas de su vida, a la Iglesia de Cristo siempre en misión, y a la entera humanidad sedienta de razones para la esperanza, DEC).
Referencia: Bula de convocación del jubileo ordinario del Año Jubilar 2025 «Spes non confundit» (La esperanza no defrauda).
Escribe una síntesis y comenta lo que te parece más significativo.
IV. ACERCAMIENTO AL COMENTARIO DE J.A. PAGOLA:
https://www.gruposdejesus.com/27-tiempo-ordinario-b-marcos-102-16-3/
Comenta lo que te parece más significativo
.
V. ACCIÓN DE GRACIAS
Acción de gracias, llamadas a la conversión y compromisos.
Desde el evangelio:
• Vuelvo a mirar la vida, los HECHOS vividos, las PERSONAS de mi alrededor… SILENCIO
• Me fijo especialmente en los rasgos de Jesús…
SILENCIO
• Llamadas que me hace -nos hace- el Padre a través de este Evangelio y compromiso (s).
Puesta en común.
A compartir jueves de mes vía online a las 21:00 horas. Quien quiera puede enviar por escrito su reflexión a todos cada semana.
VI ORACIÓN DE LOS FIELES
Pidamos a Dios nuestro Padre que complete en nosotros su trabajo de amor y fidelidad, y digámosle:
R/ Señor, guárdanos en tu amor.
Por la Iglesia, Esposa de Cristo, para que sea siempre fiel al mensaje del evangelio y del amor liberador del mismo Cristo, roguemos al Señor.
Por los hogares construidos sobre un amor desinteresado, para que a través de ellos podamos entender mejor toda la profundidad del amor de Dios, roguemos al Señor
Por las familias rotas y por los cónyuges infieles, para que la gente sea comprensiva con ellos y Dios les conceda su misericordia, roguemos al Señor.
Por los jóvenes que se preparan para el matrimonio, para que aprendan de la vida que la profundidad y belleza del amor dependen de la mutua generosidad y del sincero compartir, roguemos al Señor.
Por todos los que han renunciado al matrimonio a causa del Reino de Dios, personas consagradas, para que nunca se sientan nostálgicas y solitarias, sino que sus corazones sean espaciosos y cálidos, acogedores y abiertos a toda la gente y a todas las necesidades, roguemos al Señor.
Oh Dios y Padre nuestro, hazte presente con toda tu fidelidad dondequiera la gente se junte para construir comunidades de amor y amistad. Edifica nuestro amor sobre el fundamento del tuyo, para que perdure, fuerte y fiel, por los siglos de los siglos.
VI. PADRENUESTRO, AVE MARÍA Y GLORIA.
R/ Padre nuestro… (Cada uno lo reza para sí y expresa en voz alta lo que el Espíritu de Dios le sugiere)
VII. BENDICIÓN FINAL
Hermanos: Dios es la fuente y la fuerza de todo amor.
Que él bendiga nuestras familias cristianas con felicidad y fidelidad.
R/ Amén.
Que él bendiga nuestras comunidades con unidad y paz, y nos ayude a ser una sola alma y un solo corazón.
R/ Amén
Que él nos dé a todos un amor que haga brotar lo mejor en cada uno de nosotros para construir todos juntos una sólida comunidad.
R/ Amén.
Podemos ir en el amor del Señor.
VIII. LITURGIA DE LA PALABRA DEL DOMINGO
https://www.ciudadredonda.org/calendario-lecturas/liturgia-del-domingo
IX. INFORMACIÓN, RUEGOS Y PREGUNTAS
000discipulosmisioneros@gmail.com
Esperanza de paz en Cristo Jesús