EL GRAN REGALO DE JESÚS
Siguiendo la costumbre judía, los primeros cristianos se saludaban deseándose mutuamente la «paz». No era un saludo rutinario y convencional. Para ellos tenía un significado más profundo. En una carta que Pablo escribe hacia el año 61 a una comunidad cristiana de Asia Menor, les manifiesta su gran deseo: «Que la paz de Cristo reine en vuestros corazones».
Esta paz no hay que confundirla con cualquier cosa. No es solo una ausencia de conflictos y tensiones. Tampoco una sensación de bienestar o una búsqueda de tranquilidad interior. Según el evangelio de Juan, es el gran regalo de Jesús, la herencia que ha querido dejar para siempre a sus seguidores. Así dice Jesús: «Os dejo la paz, os doy mi paz».
Sin duda recordaban lo que Jesús había pedido a sus discípulos al enviarlos a construir el reino de Dios: «En la casa en que entréis, decid primero: “Paz a esta casa”». Para humanizar la vida, lo primero es sembrar paz, no violencia; promover respeto, diálogo y escucha mutua, no imposición, enfrentamiento y dogmatismo.
¿Por qué es tan difícil la paz? ¿Por qué volvemos una y otra vez al enfrentamiento y la agresión mutua? Hay una respuesta primera tan elemental y sencilla que nadie la toma en serio: solo los hombres y mujeres que poseen paz pueden ponerla en la sociedad.
No puede sembrar paz cualquiera. Con el corazón lleno de resentimiento, intolerancia y dogmatismo se puede movilizar a la gente, pero no es posible aportar verdadera paz a la convivencia. No se ayuda a acercar posturas y a crear un clima amistoso de entendimiento, mutua aceptación y diálogo.
No es difícil señalar algunos rasgos de la persona que lleva en su interior la paz de Cristo: busca siempre el bien de todos, no excluye a nadie, respeta las diferencias, no alimenta la agresión, fomenta lo que une, nunca lo que enfrenta.
¿Qué estamos aportando hoy desde la Iglesia de Jesús? ¿Concordia o división? ¿Reconciliación o enfrentamiento? Y si los seguidores de Jesús no llevan paz en su corazón, ¿qué es lo que llevan? ¿Miedos, intereses, ambiciones, irresponsabilidad?
José Antonio Pagola
Yo confieso mis miedos al no atreverme a denunciar aunque bien sepa anunciar la Palabra.
Yo confieso mis intereses al no lanzarme a la aventura de ‘dejar todo’ para seguir con plenitud el camino del Señor.
Yo confieso mis ambiciones al no sentirme satisfecho con mis logros materiales e intelectuales, sin bien valorar mis logros espirituales.
Yo confieso mi irresponsabilidad al no actuar con verdadera «integridad cristiana» a sabiendas de la Palabra, que me cuestiona cada día, a sabiendas también de que puedo corregirme en todo momento y en todo lugar, gracias a la misericordia del Señor.
En resumen, confieso mi «extremismo cristiano» que puede confundirse con un «fatuo fanatismo».
Saludos y bendiciones,
Gustavo
PROPUESTA DE ORACIÓN CON EL EVANGELIO
DEL DOMINGO
6º DE PASCUA – C (Juan 14,23-29)
“EL ESPÍRITU SANTO OS LO ENSEÑARÁ TODO”
Hora: Todos los jueves a las 21h Madrid
Unirse a la reunión Zoom
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ID de reunión: 815 7559 1512
Código de acceso: 665379
Preparación inmediata
(Buscar un sitio tranquilo que ayude a guardar silencio e interiorizar la Palabra desde lo que estamos viviendo a nivel personal, familiar, social, eclesial)
En nombre del Padre, del Hijo y …
ORACIÓN AL ESPÍRITU SANTO
(cada cuál elige la que quiera y le da más devoción)
Estamos ante ti, Espíritu Santo, reunidos en tu nombre.
Tú que eres nuestro verdadero consejero:
ven a nosotros, apóyanos, entra en nuestros corazones.
Enséñanos el camino, muéstranos cómo alcanzar la meta.
No permitas que perdamos el rumbo como personas débiles y pecadoras.
No permitas que la ignorancia nos lleve por falsos caminos.
Concédenos el don del discernimiento,
para que no dejemos que nuestras acciones se guíen por prejuicios y falsas consideraciones.
Condúcenos a la unidad en ti,
para que no nos desviemos del camino
de la verdad y la justicia,
sino que, en nuestro peregrinaje terrenal,
nos esforcemos por alcanzar la vida eterna.
Esto te lo pedimos a ti,
que obras en todo tiempo y lugar,
en comunión con el Padre y el Hijo por los siglos de los siglos.
Amén.
Saludo y presentación
¿Cómo y dónde estamos?
Contar de lo vivido y sucedido en esta semana: presentar sólo un hecho más significativo (HECHOS DE VIDA DEL CUADERNO DE VIDA)
Domingo 6º de Pascua – Ciclo C
LOS REGALOS DE DESPEDIDA DE JESÚS
De cuando en cuando oímos que una anciana o anciano, conscientes de que su muerte no está lejos, da consejos a sus hijos e hijas: “Cuando yo falte, haz esto o aquello para tu propio bien y felicidad. — Las palabras de despedida de Jesús se dirigen también a nosotros; son como una especie de testamento, de última voluntad. Jesús nos está diciendo que, si encontramos aquella escurridiza paz verdadera que solamente él puede dar, tenemos que amarle a él y al Padre, y también amarnos unos a otros. Tenemos que seguir escuchando al Espíritu Santo que nos recuerda las obras y las enseñanzas de Jesús.
ACTO PENITENCIAL
Nuestros pecados perturban nuestra paz.
Busquemos la paz como don del perdón del Señor.
SILENCIO (Pausa)
Señor Jesús, tú nos pides guardar tu palabra y tú nos aseguras que vivirás en nosotros.
R/ Señor, ten piedad de nosotros.
Cristo Jesús, tú nos prometes el Espíritu Santo que nos recordará tus palabras y tus obras.
R/ Cristo, ten piedad de nosotros.
Señor Jesús, tú nos das tu paz, esa clase de paz que el mundo no nos puede dar.
R/ Señor, ten piedad de nosotros.
Ten misericordia de nosotros, Señor, y danos la paz de tu perdón.
Que ningún miedo perturbe nuestros corazones, y llévanos a la vida eterna.
ORACIÓN COLECTA
Oremos para que el Espíritu de Cristo nos guíe siempre.
SILENCIO (Pausa)
Oh Padre amoroso:
Consérvanos fieles a la palabra de tu Hijo.
Danos el Espíritu Santo
para que nos recuerde
todo lo que Jesús nos dijo
y todo lo que hizo por nosotros.
Que este Santo Espíritu nos proteja
de todo miedo y cobardía
y nos dé el valor para edificar la Iglesia
en paz y con un amor paciente.
Te lo pedimos por Jesucristo nuestro Señor.
Lectura del santo Evangelio según San Juan 14, 23-29
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:
«El que me ama guardará mi palabra, y mi Padre lo amará, y vendremos a él y haremos morada en él.
El que no me ama no guarda mis palabras. Y la palabra que estáis oyendo no es mía, sino del Padre que me envió.
Os he hablado de esto ahora que estoy a vuestro lado, pero el Paráclito, el Espíritu Santo, que enviará el Padre en mi nombre, será quien os lo enseñe todo y os vaya recordando todo lo que os he dicho.
La paz os dejo, mi paz os doy; no os la doy yo como la da el mundo. Que no se turbe vuestro corazón ni se acobarde. Me habéis oído decir: “Me voy y vuelvo a vuestro lado”. Si me amarais, os alegraríais de que vaya al Padre, porque el Padre es mayor que yo, Os lo he dicho ahora, antes de que suceda, para que cuando suceda creáis».
PISTAS O PASOS/PAUTAS PARA ORAR CON EL EVANGELIO
SILENCIO (leo, releo, reflexiono, oro y contemplo: ADORO, BENDIGO Y ALABO A DIOS que sale a mi encuentro y escucho)
COMENTARIOS (leo los comentarios según los enlaces por todos conocidos, y solo anoto de modo resumido uno de ellos, para compartir con todos en el encuentro con el equipo o grupo de discípulos misioneros: MEJOR ES HACER TU PROPIO COMENTARIO)
El gran regalo de Jesús. JA. Pagola
https://www.gruposdejesus.com/6-pascua-c-juan-1423-29-2/
“El Espíritu Santo os lo enseñará todo” Fr. José Ramón López de la Osa González
https://www.dominicos.org/predicacion/homilia/22-5-2022/
El Espíritu Santo y nosotros. La ciudad santa que baja del cielo. Jesús Andrés Vicente, diócesis de Burgos
https://www.sacerdotesdelprado.org/propuesta-estudio-evangelio-domingo
COMPROMISO: ACCIÓN DE GRACIAS, LLAMADAS A LA CONVERSIÓN Y PETICIONES (vuelta a los hechos contados, vividos… descubro… y mirando al futuro pido el don del Espíritu Santo para «traducir»/concretar lo vivido en el encuentro con el Señor en su Palabra a nuestra vida cotidiana)
SILENCIO CONTEMPLATIVO (interiorizar lo contado y contemplado: gustar y sentir) Y
ANOTO PARA COMPARTIR EN EL GRUPO lo más significativo de lo que contemplado, gustado y sentido)
ORACIÓN DE LOS FIELES
Inspirados por el Espíritu del Señor, pidamos al mismo Señor Jesús que nos una, a nosotros y al mundo, en su paz y amor. Y digámosle: R/ Señor, pon tu morada entre nosotros.
Para que, en las discusiones y controversias en la Iglesia de nuestros días, los cristianos que nos comunicamos y comulgamos juntos no nos excomulguemos unos a otros, roguemos al Señor.
R/ Señor, pon tu morada entre nosotros.
Para que tengamos el valor de ser fieles al Concilio Vaticano II y nos convirtamos a su espíritu, roguemos al Señor.
R/ Señor, pon tu morada entre nosotros.
Para que los que están inquietos y los que tienen miedo encuentren la paz en el evangelio del Señor y se den cuenta de lo íntimo y cercano que está a ellos el Señor, roguemos al Señor.
R/ Señor, tu morada entre nosotros.
Para que los discípulos del Señor hoy no apaguen al Espíritu, sino que aprendan a reconocerle actuando en el mundo y en la Iglesia, roguemos al Señor.
R/ Señor, pon tu morada entre nosotros.
Para que nuestra fe nos proporcione paz, y para que el amor de Dios sea la fuente de nuestra alegría; que toda nuestra vida pertenezca a él y que él plante su tienda entre nosotros, roguemos al Señor.
R/ Señor, pon tu morada entre nosotros.
Quédate con nosotros, Señor; envíanos tu Espíritu y muéstranos al Padre; sé nuestro Señor y Salvador por los siglos de los siglos.
PADRENUESTRO, AVE MARÍA Y GLORIA
ORACIÓN POR LA PAZ
Señor Jesucristo:
Antes de dejar este mundo
tú dijiste a tus apóstoles:
“La paz les dejo; les doy mi paz,
y no como la da el mundo.
No se inquieten ustedes ni se acobarden”.
No tengas en cuenta nuestros pecados,
sino la fe y el amor de tu Iglesia santa
y danos, por medio de tu Espíritu Santo,
aquella paz y aquella unidad
que sólo tú puedes dar en tu reino
y que dura por los siglos de los siglos.
INVITACIÓN A LA COMUNIÓN ESPIRITUAL
SILENCIO
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Oh, Dios y Padre nuestro:
Tú y tu Hijo Jesús ponen su morada
en los que guardan la palabra del mismo Jesús.
Él nos ha proclamado aquí su palabra
y nosotros creemos en ella, la amamos
y la haremos realidad en nuestras vidas
por el poder del pan de vida.
Y si alguna vez llegamos a olvidarla,
que tu Espíritu nos la vuelva a recordar
y nos enseñe a vivir conforme a ella con alegría.
Que esa palabra y tu amor bondadoso
nos traigan tu paz.
Te lo pedimos en el nombre de Jesús, el Señor.
BENDICIÓN
Hermanos: Jesús nos ha dicho hoy: “Los que me aman amarán mi palabra”, es decir, llevarán mis palabras a la práctica, y harán todo lo posible para vivir como yo viví.
Que el Espíritu Santo nos guíe y nos ayude a vivir conforme al evangelio del Señor.
Y para ello, que la bendición de Dios todopoderoso, Padre, Hijo y Espíritu Santo descienda sobre nosotros y nos acompañe siempre.
LITURGIA DE LA PALABRA DEL DOMINGO
https://www.ciudadredonda.org/calendario-lecturas/liturgia-del-domingo
INFORMACIÓN, RUEGOS Y PREGUNTAS
000discipulosmisioneros@gmail.com
PAZ Y FRATERNIDAD