[Reflexión sobre la importancia de conocer a Jesús en un contacto directo con el Evangelio, a partir de un extracto del capítulo 5, “Liberar la fuerza del Evangelio”, del libro de José Antonio Pagola, Volver a Jesús. Hacia la renovación de las parroquias y comunidades, PPC, Madrid 2014]
5. Entrar por el camino abierto por Jesús
¿Cómo se ha propuesto la fe en las comunidades cristianas?
Durante muchos siglos, en las comunidades cristianas se ha propuesto la fe como deber u obligación. En la conciencia de no pocos cristianos, practicantes o alejados, persiste todavía la idea simplista y falsa de que ser cristiano es aceptar un sistema religioso que la Iglesia católica impone sin respetar la autonomía propia del ser humano.
Sin embargo, en los inicios del cristianismo, los evangelizadores no proponen un sistema religioso, sino que invitan a seguir un camino atraídos por la persona y el mensaje de Jesús.
Según Lucas, su tarea no es exponer una religión, sino enseñar el «Camino del Señor» (Hch 18,25-26; 19,9).
Hacia el año 80, un escrito cristiano conocido como carta a los Hebreos dice que es «un camino nuevo y vivo». No como los caminos viejos transitados en el pasado por el pueblo judío. Es un camino «inaugurado por Jesús para nosotros», un camino que hemos de recorrer «con los ojos fijos en Jesús, el que inicia y consuma la fe» (Heb 10,20; 12,2).
Unos años más tarde, el evangelio de Juan pone en boca de Jesús unas palabras que resumen solemnemente el núcleo de esta fe cristiana: «Yo soy el camino, la verdad y la vida. Nadie va al Padre si no es por mí» (Jn 14,6).
El objetivo de estos grupos:
Los evangelios están redactados para ofrecer a los cristianos la posibilidad de conocer ese camino abierto por Jesús. A Jesús no hay que buscarlo en el mundo de los muertos. No está ahí. ¿Dónde puede ser encontrado por sus seguidores? Hay que volver a Galilea: «Él irá delante de vosotros. Allí lo veréis» (Mc 16,6-7).
Hemos de volver al inicio. Hacer el recorrido que hicieron los primeros discípulos siguiendo la llamada de Jesús, escuchando su mensaje, aprendiendo su estilo de vida al servicio del reino de Dios y compartiendo su destino de muerte y resurrección.
Este es precisamente el objetivo de estos grupos reunidos para compartir los evangelios: volver a Galilea. Experimentar que, gracias a los relatos evangélicos, la presencia invisible y silenciosa del Resucitado adquiere rasgos humanos y voz concreta que nos llama también hoy a seguirlo.
¿Cómo entender y vivir la fe cristiana?
Desde estos grupos, comprometidos en compartir el Evangelio, es posible introducir en las comunidades parroquiales una dinámica pastoral que nos ayude a entender y vivir la fe cristiana como un «camino de vida» inspirado por Jesús, y no simplemente como el cumplimiento de un sistema religioso.
«Entrar por el camino abierto por Jesús» significa interesarnos por él, decidirnos a seguir su llamada, superar pruebas, dudas e interrogantes: todo es parte del camino.
Por otra parte, no se pueden forzar los ritmos: cada persona ha de hacer su propio recorrido. En el camino hay etapas: no todos están viviendo la misma situación.
En estos momentos de crisis y desconcierto, la comunidad cristiana debería ser cada vez más un espacio abierto, de búsqueda, discernimiento y acompañamiento mutuo en el camino de seguimiento a Jesús.
La fe, no es creer una serie de propuestas por herencia, costumbre y mucho menos por imposición o por miedo.
Es un acto libre , personal e intransferible ;una opción de seguir a una persona:Jesús de Nazaret , con todo lo que ello implica como aventrura .Ya el mismo Jesús nos dijo: Yo soy el Camino……
Camino, puesta en marcha .Nada de inmovilismos y de miedos.
A Dios no se le posee…se le busca con toda nuestra sed y esta sed nuestra es YA . El mismo empujandonos desde nuestro interior a la Aventura de su Encuentro
Jesús está vivo y nos espera, urge, como dice el texto :» Volver a Galilea…experimentar, que gracias a los relatos evangélicos, la presencia invisible y silenciosa del Resucitado adquiere rasgos humanos y voz concreta que nos llama también hoy a seguirle » .
En nosotros está hacer todo lo posible en nuestra vida y entorno , para responder a esta llamada.