Glosario de palabras
FUEGO
El fuego atrae, fascina, calienta, quema, destruye… Por eso tiene una gran fuerza evocadora.
- Puede indicar el juicio, la destrucción, el castigo: el árbol que no dé fruto «será echado al fuego» (Mt 3,10).
- Puede sugerir purificación: «él os bautizará en Espíritu Santo y en el Fuego» (Mt 3,11).
- Puede indicar ardor, purificación, amor: «He venido a traer fuego a la tierra» (Lc 12,49). En el evangelio de Tomás se puede leer: «Quien está cerca de mí está cerca del fuego. Quien está lejos de mí, está lejos del Reino» (T 82).
- Puede sugerir al Espíritu: «lenguas de fuego» (Hch 2,3).
LUZ
La luz indica cercanía y presencia de Dios que ilumina, guía, protege y da vida. «La gloria del Señor los envolvió con su luz» (Lc 2,9). «Caminar en la luz» o ser «hijos de la luz» es caminar en la verdad de Dios.
Jesús es la luz: «Yo soy luz del mundo» (Jn 9,5). El discípulo que le sigue fielmente se convierte en luz: «Vosotros sois la luz del mundo» (Mt 5,14).
La luz, en contraposición a las tinieblas significa vida, liberación, salvación, seguridad, alegría, verdad. Cuando falta el resucitado se apaga la luz: «Era al atardecer de aquel primer día de la semana» (Jn 20,19); cuando está el resucitado aparece la luz: «Al amanecer estaba Jesús en la orilla» (Jn 21,4).
TINIEBLAS
Las tinieblas son símbolo del mal, de la muerte, de la injusticia, la mentira, la falta de amor.
Son lo que se opone a Cristo, luz del mundo: El momento de la crucifixión es «la hora de las tinieblas» (Lc 22,53). Cuando Judas sale a traicionar a Jesús «era de noche» (Jn 13,30).
Los hombres prefieren muchas veces las tinieblas a la luz: «vino la luz al mundo, y los hombres amaron más las tinieblas que la luz» (Jn 3,19).
DESIERTO
Recuerda los encuentros de Dios con su pueblo. Cuando Dios invita a alguien a ir al desierto es para comunicarse con él: «La voy a seducir, la llevaré al desierto y le hablaré al corazón» (Os 2,16).
Ir al desierto es ir al encuentro con Dios: Jesús busca a Dios en el desierto.
Al mismo tiempo, el desierto es lugar de penalidades (una tierra no bendecida por Dios), de pruebas y de tentaciones (tentaciones del pueblo elegido y tentaciones de Jesús).
MAR
Los israelitas no eran un pueblo marino. Les atraía la tierra y tenían miedo al mar. El mar es símbolo del caos y del mal, el lugar donde habitan los monstruos y dragones.
En los evangelios sirve de fondo oscuro y amenazador (Mt 14,22-23). El mar es un lugar demoníaco a donde se precipitan los cerdos (Mt 5,13). Jesús camina sobre el mar dominándolo (Mc 6, 49-50). Le manda callar y calmarse (Mc 4,39-40).
En la nueva creación habrá «un cielo nuevo» y «una tierra nueva», pero ya «no habrá mar» (Ap 21,1).
VIÑA
La viña es símbolo del pueblo de Israel. Es famoso «el canto de la viña» (Is 5,1-7).
Jesús utiliza esa imagen en sus parábolas (Mt 21,33-46). Según el evangelio de Juan, Jesús es la «verdadera vid» (Jn 15, 1-17).
CAMINO
El camino es muchas veces figura de la conducta, del modo de actuar de las personas. «Preparadle el camino al Señor» (Lc 3,4).
Se puede caminar en la verdad, en la luz, y se puede caminar en la mentira y las tinieblas.
Jesús es el «camino, la verdad y la vida» (Jn 14,4).
SEMILLA
Jesús emplea la imagen del crecimiento de la semilla para hablar del Reino de Dios.
Podemos distinguir dos clases de semillas:
- la semilla del trigo que se rompe, germina, sale del suelo, se hace tallo, florece… Así es la acción oculta de Dios en la vida (Mc 4,26-29);
- la semilla de mostaza «la más pequeña» e insignificante que termina en en un arbusto donde anidan las aves (Mc 4, 30-34).
José Antonio Pagola